En una edición de los Óscar de las más competidas y reñidas que se recuerdan, el cine español reclamó ayer su hueco con una nominación para Dolor y gloria de Pedro Almodóvar, otra candidatura para Antonio Banderas por esta misma cinta, y una mención más para Klaus, de Sergio Pablos.

Joker, con once candidaturas, y El irlandés, 1917 y Érase una vez... en Hollywood, con diez nominaciones por cabeza, serán las grandes favoritas en la 92 gala de los Oscar, que se celebrará el próximo 9 de febrero en Los Ángeles.

El cine español también será protagonista en la gran fiesta del cine con tres opciones de estatuilla que refuerzan su lugar y prestigio en el panorama internacional.

Los espectadores y la crítica de todas las latitudes se emocionaron y saludaron de pie a Dolor y gloria, que remató su extraordinario recorrido con una nominación al Óscar a la mejor película internacional. Dolor y gloria tendrá un temible rival en Parásitos, el fenómeno surcoreano de Bong Joon Ho que ha arrasado en los cines de todo el planeta y que incluso se coló en la categoría reina de mejor película (cuenta con seis nominaciones en total).

También aspirarán al galardón de mejor filme internacional Corpus Christi (Polonia), Honeyland (Macedonia del Norte) y Los miserables (Francia).

Es la tercera vez que una cinta de Almodóvar aspira a esta categoría, anteriormente conocida como Óscar a mejor película en lengua extranjera, tras Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988) y Todo sobre mi madre (1999), que consiguió llevarse el reconocimiento. El manchego se anotó otro Óscar al mejor guion original por Hable con ella (2002), cinta por la que además fue candidato a la mejor dirección.

"Me hacen muy feliz estas nominaciones cuyo anuncio me pilla volando de regreso a Madrid. Es el broche final a la carrera de la película", señaló Almodóvar en un comunicado en el que subrayó también su "orgullo" por la nominación para Antonio Banderas.

Y es que el otro gran titular para Dolor y gloria fue la candidatura para el malagueño como mejor actor, que será la primera presencia del intérprete en los Óscar.

Banderas se enfrentará nada menos que al Joker de Joaquin Phoenix, máximo favorito tras su victoria en los Globos de Oro, y a los también brillantes Adam Driver ( Historia de un matrimonio), Leonardo DiCaprio ( Érase una vez... en Hollywood) y Jonathan Pryce ( Los dos papas).

Solo figurar como nominado ya es un gran triunfo para Banderas, especialmente en un fenomenal año de interpretaciones masculinas en la gran pantalla (se han quedado fuera actores como Robert de Niro, Adam Sandler, Taron Egerton, Eddie Murphy, Christian Bale...).

Pero, además, el español acudirá a los Óscar con una larga lista de méritos por su retrato del melancólico Salvador Mallo en Dolor y gloria: Palma de Oro al mejor actor en Cannes y mejor actor de la Asociación de Críticos de Cine de Los Ángeles (Lafca), del Círculo de Críticos de Cine de Nueva York (Nyfcc) o de la Sociedad Nacional de Críticos de Cine de Estados Unidos (NSFC).

Solo dos intérpretes españoles han conseguido llevarse el Óscar a casa: el talentoso matrimonio formado por Javier Bardem, mejor actor de reparto por No es país para viejos (2007); y Penélope Cruz, mejor actriz secundaria por Vicky Cristina Barcelona (2008).

No obstante, Dolor y gloria no fue la única alegría para el cine español, ya que Klaus, del director Sergio Pablos (conocido por participar en la saga Gru: Mi villano favorito) luchará por la estatuilla al mejor filme de animación. "Estamos completamente abrumados por este gran honor", admitió el creador madrileño en cuanto conoció su candidatura por un filme artesanal, dibujado a mano, que cuenta el origen de Santa Claus, que sitúa en una remota isla.

Esta producción de Netflix y Atresmedia se medirá cara a cara con Cómo entrenar a tu dragón 3, ¿Dónde está mi cuerpo?, Mr.Link: El origen perdido y Toy Story 4.