La expresión se usa para referirse a cuando alguien tiene que apechar con las consecuencias adversas que se le presentan, y en particular cuando esta situación es resultado de los propios actos o errores cometidos. En el español de Canarias el verbo "mamar" contiene varias acepciones. Creemos que aquí guarda relación con el americanismo usado para predicar de alguien que tiene que 'soportar' o 'aguantar algo o a alguien'; aunque también se presta a un sentido figurado: mamar como sinónimo de 'comer(se)', 'tragar(se)'. [Con valor similar a la expresión coloquial en español (de España): "comerse (o tragarse) el marrón": cargar alguien con la culpa o consecuencias de algo]. Asimismo la voz "tranca" parece apartarse de las acepciones más comunes ('borrachera', 'palo grueso de madera que sirven para trancar la puerta', 'pestillera' o 'cerradura'). "Tranca" puede ser sinónimo de los derivados "tranque" o "trancazo": 'chasco' , 'engaño', 'encerrona', 'quintada' o 'montada' ("pegarle a alguien un tranque"). El sentido usual que conocemos es el que se refiere a un evento, en particular a un espectáculo pesado, aburrido o de mala calidad ("la película era una tranca"). "Trancazo" se asocia entre los elementos del imaginario doméstico a la tranca o palo grueso que se guarda detrás de la puerta para asegurar su cierre, y es posible que para "funciones defensivas".

Por extensión semántica -o acaso por metonimia- "trancazo" ha pasado a ser sinónimo de golpe fuerte, violento; y por ende, "tenerse que mamar la tranca" es cargar con las consecuencias de la propia actuación que por falta de cautela o por exceso de confianza nos ha llevado a tal situación.

Podemos incluso leer un titular en la prensa que se hace eco de las manifestaciones de cierta edil ante sus convecinos: La concejala soy yo y se la tienen que mamar. A veces se recurre a esta fórmula abreviada, pronunciando solo el verbo (mamar) y omitiéndose el complemento en la segunda parte de la frase (la tranca). Este uso puede resultar malsonante o incluso soez, en cuanto tiende a sugerir, de manera subliminal, cierto mensaje de contenido sexual; sin embargo, con ella quiere decirse que como la concejala "es la que manda", hace lo que considera oportuno "y se tienen que aguantar", es decir, los vecinos deben atenerse a las consecuencias. Puede ser sinónimo del aforismo castellano "ir a por lana y salir trasquilado" , en el sentido de ir con la intención de sacar partido de una situación o beneficiarse de algo, y "salir con el rabo entre las patas" , escarmentado. La expresión tiene en cualquiera de los casos un sentido admonitorio en cuanto recrimina una actuación consciente o un resultado buscado, y concluye que cada uno tiene lo que se merece (con cierta afinidad a: "el que la busca, la encuentra").

En nuestra opinión, el "mamarse la tranca" tiene un sentido más amplio y puede hacer referencia a otros supuestos. Como por ejemplo, al que refiere este dicho castellano muy usual en Canarias: "que cada palo aguante su vela", que a modo de sentencia se usa para dar por sentado que cada cual debe soportar las consecuencias de sus propios actos o impuestas por las circunstancias. Se construye sobre la base de una metáfora marinera que soterra elementos simbólicos más trascendentes. El mástil del navío (palo que sostiene una vela) constituye un símbolo axial. Los símbolos axiales representan el "eje del mundo" y, según algunos simbolistas, el eje es lugar de enfrentamiento de contrarios donde a veces se representan dos fuerzas de oposición y equilibrio (que encuentra su más completa manifestación en el mitológico caduceo). Las velas cazadas al mástil desafían la furia del viento, provocando sobre ellas una fuerza de resistencia y otra de empuje que permiten desplazar la nave hasta navegar, incluso, en contra del viento. La vela es, pues, una metáfora de resistencia y empuje frente a los propios problemas y adversidades, mientras que el palo es soporte de la vela. "Que cada palo aguante su vela" nos sugiere que cada cual debe asumir y afrontar sus propias dificultades aprovechando las situaciones adversas para superarlas. En cierto modo se corresponde con: "capear el temporal", que se refiere a cuando con habilidad y destreza se evitan situaciones difíciles o se consigue salir de ellas indemne? Y si no, "a mamarse la tranca".