Cultura del Gobierno de Canarias selecciona siete cortometrajes de realizadores de las Islas para su promoción en festivales y mercados especializados durante el próximo año. Esta nueva edición del catálogo Canarias en corto cuenta con los trabajos que obtuvieron mayor puntuación en una convocatoria en la participaron 36 cintas y que estuvo a cargo de una comisión de expertos. Estos trabajos contarán ahora con el respaldo de una distribuidora especializada que se encargará de la inscripción de los mismos en eventos de ámbito nacional e internacional.

Los trabajos que formarán parte de la nueva edición de este programa, que cumple este año su décimo cuarta edición son, por orden de puntuación: Zapato roto, de Domingo de Luis; Océano, de Fernando García-Moreno; Selfie, de Nayra Sanz Fuentes; Las grietas, de Valentino Raffaele Sandoli; Los espacios confinados, de Razzak^Ukrainitz; Fuera de campo, de Pablo Vilas Delgado; y Grietas, de Alberto Gross Molo.

La selección estuvo a cargo de un comité de expertos integrado por la responsable de la promoción del audiovisual del Instituto Valenciano del Audiovisual y la Cinematografía, Dora Marí; el programador de cortos del FICX, Jorge Rivera González; y el especialista en programación y educación audiovisual, Álvaro Yebra García. Los criterios de valoración han sido, en este orden: la calidad artística y técnica; la originalidad y nuevas propuestas y la participación del equipo técnico y artístico canario en la producción. Canarias en corto es la plataforma que utiliza el Gobierno para la difusión y distribución nacional e internacional de cortometrajes canarios, así como de sus creadores y equipos técnicos y artísticos desde 2006.

Zapato roto. El cortometraje de Domingo de Luis se adentra en la silenciosa mirada de Pedro, un niño cuyo sueño por correr se ve truncado por la realidad familiar y social que lo rodea.

Océano. La cinta dirigida por Fernando García-Moreno Alcántara muestra la historia de Andrea quien acaba de cumplir 30 años. Se siente perdida y para colmo, la han echado del trabajo por lo que vuelve a casa de su madre. Últimamente le cuesta salir de la cama, fuma más de lo habitual y se pasa los días encerrada en su casa mirando a través de los prismáticos las ventanas de sus vecinos o haciendo scroll como un autómata en redes sociales. Hoy la ha despertado su madre antes de irse a trabajar, pero la monotonía arrastra a Andrea a su rutina habitual, de falsa compañía, voyerismo y mucha desidia.

Selfie. Nayra Sanz Fuentes se replantea el concepto de (auto)retrato social en esta miniatura conceptual y sensorial. La directora juega con las distorsiones de un Gran Hermano que nos observa impasible; un estado tecnológico de control permanente, de mecanización de una vida diaria dominada por los ingenios que el ser humano ha creado y que se han hecho finalmente con el control de nuestras vidas.

Las grietas. Valentino Raffaele Sandoli relata en este cortometraje la historia de Carmen y Julia, dos hermanas de mediana edad que viven los últimos días de vida de su padre que se encuentra enfermo terminal.

Los espacios confinados. Razzak^Ukrainitz habla en este trabajo de hal?l, del árabe "permitido, no contrario a la ley"; del hebreo, "espacio, espacio exterior". El creador A veces los espacios permitidos se convierten en espacios confinados y solo queda libre el espacio exterior.

Fuera de campo. Esta obra de Pablo Vilas Delgado muestra cómo es la vida en el extrarradio de Calera (Chile) en particular, pocas cosas se consideran importantes. Todo lo demás ocurre fuera de campo.

Grietas. Alberto Gross Molo relata la historia de una familia se rompe. El día en que Marcos y su hermano pequeño tienen que escoger a uno de sus padres, Marcos intentará convencer a Sergio de ir a vivir con su padre. Sin embargo, Sergio no quiere alejarse de su madre. La disputa de los adultos pasará a ser la suya: un divorcio no destroza solo un matrimonio, sino toda una familia.