Las Vegas estuvo, la madrugada de ayer, un poco más cerca de Canarias. La ceremonia de entrega de los Grammy Latinos sirvió para catapultar aún más a la cantante catalana Rosalía, protagonista absoluta de la velada al hacerse con el galardón que distingue a El mal querer como mejor álbum del año y como Mejor álbum local contemporáneo. También se hizo con el premio a la Mejor canción urbana gracias a Con altura, tema que interpreta junto a J. Balvin. Pero el éxito de la artista española más internacional es también el éxito de su inseparable productor, el canario Pablo Díaz Reixa, El Guincho, que se hizo también con un Grammy a la Mejor ingeniería de grabación por un álbum por el mismo trabajo discográfico.

El premio lo comparte con su equipo, los ingenieros y productores Brian Hernández, Jaycen Joshua y Chris Athens. Sin embargo, fue el artista grancanario afincado en Barcelona el encargado de recoger y agradecer el galardón. "Muchas gracias a la academia", dijo. "Primero que nada quiero darle las gracias a todo los productores e ingenieros, ustedes saben quiénes son", aseguró. Asimismo, continuó, compartió el ansiado galardón con su "amiga del alma, Rosalía, por ver en mí a la persona que le podía ayudar para dar el salto en su carrera". "Hicimos este álbum en mi casa, sin dinero. Fue un año y medio en el que Rosalía y yo estuvimos explorando con mi hombre Brian Hernández siempre a mi espalda, siempre ayudando", sentenció.

Además, El Guincho, que no suele ser prolijo en publicaciones en sus redes sociales, utilizó ayer su cuenta de Instagram para compartir momentos de la velada de premios. Además de grabar parte de la actuación de Rosalía en la gala, que interpretó Con altura, también compartió una foto suya posando con los galardones con el mensaje "feliz como un niño chico".

Rosalía continuó arrasando en Las Vegas con otros premios "indirectos", como el de Mejor diseño de empaque del disco, que fue para Man Mourentan y Tamara Pérez. En total, por tanto, la obra de Rosalía se volverá para España con cinco gramófonos dorados. "Estoy en shock, es lo último que me esperaba, os lo juro por dios", exclamó la artista. "Muchas gracias a la gente que apoya mi música. Estoy trabajando muy duro para estar a la altura de vuestro apoyo", añadió la intérprete catalana.

El palmarés de estos Grammy Latinos dejó, asimismo, otros vencedores importantes como Juan Luis Guerra, Tony Succar, Pedro Capó, Kany García y Andrés Calamaro, todos ellos con dos Latin Grammy por cabeza.

"A nuestros hijos, porque al final del día sabemos todos los colegas que el sacrificio duro lo sufren ellos", afirmó Capó al recibir el premio a Canción del año por la optimista Calma.

Los premios, que festejaban su vigésimo aniversario, no se salvaron de las críticas vertidas por parte de los artistas urbanos por la escasa presencia del reguetón y el trap entre sus nominados. De ahí que Bad Bunny, que consiguió el premio al Álbum de música urbana por X 100PRE, aprovechara la ocasión para reivindicar el terremoto mundial que ha provocado este género. "A todos los músicos, a toda la gente que pertenece a la academia, con respeto: el reguetón es parte de la cultura latina y está representando, al igual que otros muchos géneros musicales, a los latinos", afirmó.

La gala comenzó con un enérgico tributo al legado de la música latina y artistas como Olga Tañón, Anitta, Reik, Calibre 50 o Prince Royce se unieron sobre el escenario para entonar himnos como La vida es un carnaval de Celia Cruz, la venerada artista cubana que tan estrecha relación tuvo con Tenerife, o De música ligera de Soda Stereo.