Miguel de Unamuno llega al Paraninfo de la Universidad de La Laguna a través de una de las obras menos representadas del escritor y filósofo español, El otro. Celia Bermejo, Domingo Cruz, Carolina Lapausa, José Vicente Moirón y Silvia Marty protagonizan esta colaboración entre España y México dirigida por Mauricio García Lozano y que podrá verse esta noche, a partir de las 20:30 horas. Con anterioridad, 1.200 escolares han tenido la oportunidad de descubrir esta reflexión sobre la identidad y la locura.

Misteriosa con el personaje que interpreta, Silvia Marty vuelve a la Isla después de varios años de ausencia. Pendiente del estreno de su nueva serie de televisión, Desaparecidos, la actriz barcelonesa celebra participar en esta coproducción, un trabajo "muy gratificante", que espera ahora poder llevar a México.

¿Es la primera vez que realizan funciones para escolares de esta obra?

Sí. Sí que han venido niños antes y, en uno de los ensayos vino una compañera con algunos jóvenes, los trajo para ver cómo reaccionaban y les encantó. Al fin y al cabo El otro es un thriller por lo que enseguida engancha. Además, como dura poco más de una hora, el tiempo pasa muy rápido y engancha y a mitad de la función todo se precipita, así que creo que va a funcionar muy bien. Además, El otro es Unamuno pero tratado de una forma con la que a los escolares les es fácil acercarse a la historia. Unamuno suele ser bastante complejo pero esta adaptación no lo es para nada por lo que es una forma de poder acercarlo al público juvenil.

Se trata de un obra estrenada en 1932. ¿Cómo ha sido el proceso de adaptación?

No está traída a la época actual pero sí es una adaptación del texto original. Está hecha de tal manera que engancha mucho; además, más allá del trasfondo de la obra, el hecho de que sea un thriller permite que sea muy trepidante y para todo tipo de público.

El otro es una de las piezas más desconocidas de Unamuno. ¿Es complicado trabajar sin a penas referencias?

Se representó en el festival de Mérida y no se ha represando mucho más. Yo creo que, entre otras cosas, es por la complejidad del texto original. Es cierto que al ser esta una versión, hay bastantes diferencias con el texto original. Se mantiene el mundo de Unamuno pero es una versión y eso hace que la haga muy cercana y engancha a todo tipo de público. De todos modos, Unamuno no es un autor que se haya representado mucho, pero es muy interesante y esta obra lo hace más cercano.

¿Cómo le llegó oportunidad de participar en esta obra?

Ha sido uno de los pocos proyectos en los que me embarqué a ciegas. No conocía al director pero sí tenía referencias muy buenas de gente que había trabajado con él. Él es de México y viajó a Madrid para empezar con el proyecto y tuvimos una conversión por Skype y nos conocimos así. Fue ahí cuando decidí participar tan a ciegas porque me pareció que el director tiene un coco impresionante y me apetecía probar lo que él me proponía, a ver qué salía de todo esto. Me apetecía hacer un trabajo de imaginación. Tampoco teníamos muy claro qué personaje iba a hacer yo pero de repente todo cuajó. Poder experimentar y encontrarte con un director que me diera el espacio para poder crear ha sido muy enriquecedor. Estoy encantada con el personaje y sobre todo con el giro que el director ha permitido para él.

Le ha tocado dar vida a un personaje muy duro.

Lo que me gusta es que es un personaje que llega en un momento de la historia y que lo gira todo del revés, así que es muy agradecido. Además, se abre al público y eso como actriz es muy enriquecedor. Además, me encanta poder arriesgar. También es muy gratificante poder tocar una tecla en la partitura para que la obra vaya de un tiro.

Unamuno afirmaba que esta obra trata de "un tema más interesante que el amor: la personalidad". ¿Está de acuerdo?

Sí, es cierto. Los grandes temas universales son el amor, que es por antonomasia el gran tema, y también, a nivel más humano, la personalidad. Unamuno habla muy bien de ese desdoblamiento en esta obra porque era un problema que él mismo sufría y que trató durante mucho tiempo. Creo que es muy interesante poder tratar un tema como la crisis de identidad porque además se trata de un aspecto que perdura en el tiempo. Evidentemente todos nos enfrentamos a este problema en mayor o menor medida y hay gente que tiene patologías más graves. Es un tema vital y muy importante.

Se trata de una producción entre España y México. ¿Cómo ha sido trabajar con un equipo de fuera del país?

Ha sido muy enriquecedor. A nivel personal, a mí me encanta trabajar con gente de diferentes países. En este caso, trabajar con Mauricio ha sido muy enriquecedor porque curiosamente Unamuno es algo muy nuestro, muy español, pero ha sido alguien de fuera quien ha trabajado este texto y ahí es donde te das cuenta que es un autor y trata unos temas universales. De hecho, Mauricio ha hecho muchos símiles con su país. Yo creo que trabajar con gente tan dispar también es muy enriquecedor.

Pone en escena esta obra mientras tiene pendiente de estrenar otros proyectos, como series de televisión. ¿Trata de combinar las diferentes facetas de su profesión?

Sí, siempre ha sido esa la idea. Creo que se trata de una profesión en la que puedes disfrutar de todas las facetas. Eso a mí me encanta. Bienvenidos proyectos, que vengan muchos y sean de mucha calidad.