Nada más diferente de Nothing Hill, la obra más recordada del director Roger Michell, que esta Blackbird con la que ayer se estrenó la Sección Oficial del 67 Festival de Cine de San Sebastián, un tremendo drama familiar que ha llenado de lágrimas el patio de butacas del Kursaal.

Blackbird es una remake de Silent Heart, que ya se pudo ver en el Zinemaldia en 2014, y que ni Michell ni sus espectaculares actores han querido ver todavía.

"Queríamos hacer la película de Roger y personalmente", apuntó el jurásico Sam Neill en una rueda de prensa, "no quería ver a otro actor interpretando mi papel antes de hacerlo yo; que no me influyera, ni replicarlo. Todavía no tengo la valentía de verlo por si es mejor que yo", dijo medio en serio, medio en broma.

La película no es que toque la cuestión de la eutanasia, señaló Michell, sino que "la coge con las dos manos"; Blackbird, un título enigmático que esconde "la decisión" (así se traducirá en su versión en castellano), habla de la última voluntad que, aún lúcida y capaz, toma una enferma de ELA sobre su propia vida: el momento de su muerte.

Josefina Molina, Premio Nacional

La directora de cine y guionista Josefina Molina recogerá hoy el Premio Nacional de Cinematografía 2019 en el marco de la 67 edición del Festival de San Sebastián, en reconocimiento a su papel como "pionera" y "referente" de varias generaciones de cineastas.

"Estábamos destinadas a ser amas de casa, todo en la sociedad nos impulsaba a serlo exclusivamente", afirmaba.

Precisamente, tal y como ha avanzado Molina, en el discurso que pronunciará durante el acto de entrega hará referencia al "impacto que tiene en una mujer de 83 años" este galardón.

Varoufakis, ausente

El exministro griego de Finanzas, Yanis Varoufakis, no asistirá hoy a la proyección de Adults in the Room (Comportarse como adultos), tras la entrega del Premio Donostia a su responsable, el cineasta Costa-Gavras.

Los organizadores del certamen explicaron que el director del Zinemaldia, José Luis Rebordinos, será la persona encargada de conceder al cineasta la máxima distinción honorífica del certamen.

Según han señalado desde la propia organización, la ausencia de Varoufakis se debe "a compromisos de última hora".