Si de algo sabe Carlos Rivera, además de cantar, es de acompañarse de un buen equipo. Así, en buena compañía, apareció el mexicano en el concierto que ofreció anoche en el Pabellón Santiago Martín de La Laguna. Como si de un ejército de música se tratara, sus bailarines y la banda se plantaron en el escenario para entonar Amo mi locura y dar su propia Guerra, que así se titula su último disco.

"Pierde la locura y mueve tu cintura", animó con su canción a todos los presentes, y su público, fiel y entregado, no quiso defraudarle. Más de 4.000 personas acudieron anoche a su recital tinerfeño. Rivera llegó a la Isla dentro de su Guerra Tour 2019, una guerra "de las buenas", de las musicales. Después de su aparición en el recinto lagunero, Rivera se trasladará hoy hasta la vecina isla de Gran Canaria, donde se presentará en el Gran Canaria Arena. El artista, famoso por haberle puesto música a la película de Disney Coco con Recuérdame, asegura sentirse especialmente "cómodo" con el público de las Islas.

Rivera no paró de bailar y de animar al público a compartir con él cada una de las canciones. No faltaron Te esperaba, Luna del cielo, Lo digo, Otras vidas o Regrésame a mi corazón. El artista protagonizó hasta tres cambios de vestuario y, además, recordó su último concierto en la Isla, en el Auditorio, y sacó a bailar con él a una chica del público. "Me llena de ilusión estar aquí", dijo.

Esta gira incluye más de 30 fechas entre Latinoamérica, Estados Unidos y España. En este periplo internacional está presentando los temas de su último trabajo, Guerra, con el que ha cosechado múltiples éxitos. Entre otros, ha colocado este trabajo en el número uno en ventas del país. De hecho, estuvo el 14 de marzo en la Isla para recoger un Premio Dial, tercero de su carrera.

En sus directos, Rivera demuestra además sus dotes como bailarín, curtido en los escenarios tras su trabajo en el musical de El Rey León dando vida a Simba. Ha sido escogido para ponerle voz al mismo personaje en la película que acaba de estrenar Disney.