Premio Herralde de Novela con Lectura fácil, Cristina Morales acaba de visitar la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife, donde concentró la atención de numerosos visitantes durante la promoción de esta obra en la que retrata las vivencias de cuatro mujeres etiquetadas con discapacidad intelectual, pero con una gran fortaleza para afrontar las situaciones de dominación que le han tocado vivir.

¿Prefiere usar temas incisivos, que remuerdan conciencias?

No es una cuestión de preferencia, sino que una escribe de lo que le duele o de lo que le afecta personalmente. La temática de Lectura fácil refleja el sometimiento en todos los aspectos de la vida, por parte de los poderes económicos y poderes públicos. Retrata mi día a día y el día a día de muchas. El que esté libre de sometimientos que tire la primera piedra.

¿Qué aporta la condición de discapacitadas a las protagonistas de 'Lectura fácil'?

No podría ser la historia que es si no tuvieran esa característica. El hecho de que hayan sido tachadas como personas con discapacidad intelectual les permite una visión del mundo desde el tutelaje, la sumisión y el dominio de todos los detalles de su vida, en la que no pueden elegir ni la ropa que se ponen. De ahí que retrate su lucha por poder vivir como les dé la gana, cada una a su manera; unas lo consiguen, otras no porque son personajes trágicos. Pero no es un libro de superación personal o de coaching, al contrario, soy muy crítica con el coaching.

Entonces, ¿tienen opciones?

Muchas han tomado la determinación de ser críticas o guerrilleras, simplemente en su devenir no está la politización en sentido clásico de sentirse objeto de las tiranías; viven su vida como un devenir.

¿Se siente identificada con alguna de ellas?

Yo diría que con todas. La novela es un retrato de los padecimientos que sufrimos, que a veces se puede luchar contra ellos y otras se resuelven a favor de los poderosos. Por todo eso he pasado yo.

¿Las mujeres pueden cambiar las cosas que no funcionan?

No creo que se pueda hablar de las mujeres como si fuera una categoría unívoca. Yo no soy Christine Lagarde dirigiendo el Fondo Monetario Internacional, porque los problemas de ella no son los míos. El concepto de mujer cambiando cosas es demasiado vago y no me sirve operativamente hablando.

¿La literatura destinada a las mujeres tiene que ser feminista o se puede hacer literatura sin mensaje?

Mi literatura no está destinada a las mujeres, ese es un nicho de mercado que existe editorialmente que tiene como target una lectora mujer, que es un concepto muy concreto de lo que se entiende como tal. Es algo que explotan por intereses económicos, igual que si fuera un anuncio de bebidas refrescantes. El feminismo que a mí me interesa no es el que está dirigido a las mujeres como concepto biológico.

¿La indignación como postura ante el sistema es inevitable?

Ojalá fuera así, el concepto proviene del 15M, un movimiento que si sirvió para algo no se trasladó a las urnas, porque luego ganó Mariano Rajoy. La indignación claro que es necesaria, pero en general fue rentabilizada por los partidos para la llamada nueva política del cambio, y son precisamente los que han cortado los discursos populares, de los activistas de base, para sacar beneficio del sillón que ocupan y del dominio de uno sobre otro.

En 'Malas palabras' se metió en la piel de santa Teresa de Jesús.

Fue un encargo curioso de Editorial Lumen, que quería conmemorar el quinto centenario del nacimiento de la santa. Fue un auténtico proceso de aprendizaje porque meterme en su piel significó mudarme de piel, ya que lo que nos han enseñado desde las escuelas está muy lejos de lo que fue en realidad. Se suavizó su discurso e incluso Felipe II favoreció su canonización, pero en realidad se neutralizó la obra revolucionaria que hizo en no solo en el seno de la Iglesia, sino en la literatura y la sociedad.

¿Cuál es su próximo reto literario?

Acabo de escribir un pequeño texto que acaba de salir en editorial Sexto Piso, un esbozo que anuncia un trabajo ensayístico en torno a la puta como centro del discurso feminista.

¿En qué momento se definiría de su trayectoria creativa?

Aunque tengo ya 33 años, destacan de mí el tono, la frescura y la radicalidad de mi voz, que se suele asociar a la juventud, pero considero que todos tenemos que aprender de la radicalidad de nuestros mayores. Me considero una aprendiz de las luchas de otras y otros que me doblan y triplican la edad.

La Feria del Libro, hoy

Roy Galán presentará hoy Haz que no parezca amor en la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife, en el que ofrece a sus lectores y seguidores en internet una recopilación de sus mejores textos de la red y otros nuevos escritos para esta ocasión. Será a las 20.00 horas en el Espacio Agustín Espinosa.

La escritora Ángela Ramos dará a conocer La vida que nos queda, una novela sobre el mobbing, a las 17:00 horas. Una hora más tarde, la abogada y doctora en Arquitectura Dulce Xerach regresa con Secuestro en Hong Kong, una nueva historia de la inspectora María Anchieta. A las 19:00, el exteniente del Ejército de Tierra Luis Gonzalo Segura conversará con el periodista Eduardo Rojas sobre En la guarida de la bestia, que retrata los acosos a la mujer en las Fuerzas Armadas. A partir de las 21:00 horas, se proyectará al aire libre la película La estrategia del pequinés, adaptación de la novela homónima de Alexis Ravelo dirigida por Elio Quiroga.