La Compañía canaria Clownbaret interviene desde hoy hasta el domingo, 5 de mayo, en el I Festival Internacional Nuevo Teatro Circo de Villaquilambre (León), con 5 actuaciones. Su presidente, Brian Rodríguez, impartirá el taller Patinando en el fango, destinado a todos aquellos que quieran iniciarse en el arte del payaso.

¿Qué significa este festival para Clownbaret?

Es el fruto de una labor continua y bien hecha, ya que llevamos cuatro años formando parte estable de la programación nacional, a la vez que la reafirmación de que nuestro trabajo funciona allá a donde vamos. En Castilla y León hemos estado anteriormente y el público nos recibe de una manera increíble.

¿En qué consiste el taller que va a impartir?

Es una aproximación al arte del clown, que es simplemente estar jugando y sintiendo aquí y ahora desde tu lado más divertido, sin las máscaras que impone la sociedad, su ritmo y su desconfianza en los seres humanos. Precisamente trabajamos bastante en romper esas máscaras para ver el lado más humano, vulnerable y ridículo de los participantes.

¿Hay más demanda de espectáculos de circo y clown en los últimos tiempos?

Afortunadamente crecen los festivales de circo y clown. Por desgracia muy a menudo por caminos independientes ya que el circo contemporáneo se olvida de la belleza de lo imperfecto, de lo ridículo, y es por eso que el clown no tiene cabida en sus programaciones.

¿Qué diferencias hay a la hora de concebir un espectáculo para adultos y uno familiar?

Básicamente la libertad, la falta de autocensura, ya que puedes ir con las cosas un poco más lejos, pero la base es la misma. La mayoría de nuestros espectáculos tienen varias capas que pueden disfrutar tanto niños como adultos. Tanto para unos como para otros el juego, el disfrute y estar presentes aquí y ahora es lo primordial; luego es cierto que hay obras con una dramaturgia más teatral que llevan una historia y otros que son más shows de sketch que se podrían presentar de manera más individual. La capacidad de atención es diferente, pero afortunadamente en las dos líneas conseguimos trasmitir y crear diferentes emociones.

¿Cuántas personas conforman la compañía?

La base de todos los espectáculos parte de Sigrid Ojel y mía, pero para nosotros la compañía son todos los actores que forman parte de los diferentes espectáculos, la persona que nos hace distribución y prensa, así como los técnicos que nos suelen acompañar.