Nicky Jam se ha dado una segunda oportunidad y vive un nuevo presente artístico que culminó a comienzos de año con su álbum "Fénix", que lo ha metido de lleno en lo más alto de la industria discográfica latina. Y así, concierto a concierto, va aireando el magnetismo que le ha hecho ganarse a millones de seguidores.

Anoche lo hizo en Tenerife, con un intenso concierto con el que cautivó a los miles de seguidores que se dieron cita en el recinto portuario de la capital tinerfeña para presenciar uno de los últimos conciertos de su gira europea. Al igual que muchos otros artistas del género, partiendo del reggaeton y llevando su propuesta hasta distintas cadencias latinas, Nicky Jam los tiene ganados desde el minuto cero. Ayer, este rincón escénico de Tenerife fue un coro con temas como "El ganador", "El amante", "Travesuras" o "Mi maldición".

No le costó agitar al público y desde el inicio quedó claro que estábamos ante otra gran fiesta de la música latina en Tenerife. El artista que más nominaciones, junto a Shakira, ostenta para la próxima edición de los premios Bildboard se mostró comunicativo con el público, y esa reciprocidad de cariño hizo aún más intenso el exitoso concierto.

Acompañó la temperatura, cómplice de la cadencia casi hipnótica del reggaeton. Nicky Jam fue uno más de la familia de miles de seguidores que lo arroparon en Santa Cruz y él se sirvió con cuchara grande, generoso, aireando esa imagen icónica que le permite ser uno de los cantantes más exitosos del presente musical latino.