Grupos del Carnaval piden a Patricia Hernández que la organización les respete

«No prometas nada que no puedas cumplir». Fue el consejo que le dio Masi Carvajal, de Diablos Locos, a Patricia Hernández, candidata del PSOE a la Alcaldía de Santa Cruz. De ahí que la exalcaldesa apostara por un discurso para tocar el corazón de los casi setenta representantes de grupos del Carnaval que secundaron la primera reunión electoral de socialistas con el feudo de CC.

Hernández explicó que prefirió encontrarse con miembros de la familia del Carnaval en un local y no en un hotel, para agradecer la acogida dispensaba por la Masa Coral Tinerfeña, que prestó su histórica sede, testigo de muchos bailes en la época más gloria. 

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De la cita no se esperaba qué iba a prometer la socialista para deslumbrar como saber su poder de convocatoria entre carnavaleros en una cita que acudió por lista José Ángel Martín, Andrés Martín Casanova y Matilde Zambudio. 

En la Masa Coral, históricos del Carnaval, como Coriolano González, anfitrión; José Manuel González, de Cariocas; Manolo Peña, de la sociedad Mamel’s, y Fernando Rivero, presidente de su rondalla; Carlos Estévanez, de La Sonora; Luis Hernández, de Danzarines Canarios; Pablo Chueca, de Zeta-Zetas; Masi Carvajal yVíctor Asensio, de Diablos Locos; Luci González, de la asociación de diseñadores; Pedro Ortega, de Sabor Isleño; Javier Ramos, de Triqui-Traques; Juanjo Coello, de la Sociedad Guachi, Gloria Camacho, de Las Jediondas; o Rogi Monzón, de la histórica y pionera comparsa Los Rumberos, o Vicky López, de la Rondalla Valkirias y número 20 en la lista del PSOE en La Laguna, entre otros participantes, que desbordaron el salón de actos hasta el punto de que acabaron ocupando la parte alta de la sociedad.

La candidata fue a prometer una concejalía exclusiva de Carnaval, un museo a la medida de la fiesta, una cátedra, un nuevo recinto que albergue los locales de ensayo, de los grupos, retomar la Comisión Mixta y los propios representantes le enmedaron la cita al reclamar el respeto que dicen ahora no sentir desde la organización. El presidente de Gran Tinerfe o la representante de Chincanayros lamentaron la situación de sus locales, apuntalado uno y otro, donde se caen las ventanas.