«Zeta-Zetas se subió al escenario el día de la final coaccionado, fue triste cómo actuó la organización»

¿Cuántos años vinculado al Carnaval de Santa Cruz de Tenerife de Santa Cruz de ?

¡Quién te ha visto y quién te ve! Si te refieres a mis inicios en 1973, pero ya mi padre me llevaba de pequeño a los concursos de rondallas de niño.

Zeta-Zetas devuelve la visita a Cádiz

Pero la rondalla Mamel’s es culpa suya.

Y de Lito Díaz, y de Richar Casanova en su momento. En su momento aposté por la rondalla y me siento orgulloso. Solo me queda por fundar una agrupación, porque constituí una rondalla, una murga infantil, una adulta y una comparsa.

¿Qué comparsa?

Los Tamanacos, con Suso Trujillo. No me queda nada (se ríe).

Cerró una etapa como murguero que retomó este año.

Sí, retomo este año un poquito. Ya alguna murga me había dado en toque en su momento pero no creí oportuno y esta vez...

¿Quién le convenció?

El empujón para estar en Zeta-Zetas se lo debo a mi familia, porque me dijeron que aprovechara para matar el gusanillo porque es la murga idónea para mi por mi forma de ser y porque me gusta hacer cosas diferentes.

¿Habría vuelto a Mamelucos si lo hubieran llamado?

No, no... no hace falta que me llamen ni muchísimo menos.

Pero Mamelucos es su murga.

Es verdad que fue mi murga. Pasado ya unos años, ni frío ni calor. Cuando me llamó Richar Casanova, el director musical de Zeta-Zetas (y en el pasado de Mamelucos), me dijo que tanto Javier Lemus como Santi Martel (director y letrista de Zeta-Zetas) querían hablar conmigo. Me senté, escuché por encima y aporté entre amigos alguna cosilla. Y no me arrepiento de haber dicho que sí.

¿En qué se parecen los Mamelucos de su época con los Zeta-Zetas actuales?

Siempre he dicho que quiero hacer cosas distintas, como el uso de la guitarra en la presentación de Zeta-Zetas este año; era la única que se puede atrever a eso.

¿Tuvo que ver con la presentación instrumental de hace tres años de Zeta-Zetas?

No, pero sí hay una anécdota, porque me llamó Richar para decirme que escuchara la presentación porque sabía que yo tenía alguna prevista que nunca llegué a hacerla con Mamel’s. En aquella época se temía mucho por las bases del concurso, algo por lo que en algunos momentos he pasado, máxime cuando dice que eso no puntúa. Y Zeta-Zetas es verdad que te anima a eso.

A buscar los vacíos legales en las bases del concurso.

Alucino con Zeta-Zetas con la interpretación que realiza de las bases del concursos. A mi modo de entender, para el riesgo que corren con todo lo que hacen están en el límite pero se adaptan a las bases como ninguno.

Por ejemplo, al interactuar en la final con las autoridades, que estaban en la grada.

Lo triste de todo esto es la forma de cómo se actuó contra Zeta-Zetas. Es el mismo número de componente de otra murga para hacer su repertorio.

Sí, pero las bases dicen que la actuación no puede discurrir fuera del escenario.

¿Pero de cuándo es esa interpretación? ¿De ahora? ¿Porque era Zeta-Zetas? He visto ese tipo de actuaciones en otros momentos. Nosotros hablamos con el alcalde y estaba dispuesto para este tema, nunca se negó a colaborar, con la única condición de que había que mirar con el plan de seguridad. Lo que no estoy de acuerdo es que el mismo tres de febrero haga un comunicado a Zeta-Zetas, e imagino que a Diablos Locos también, no lo sé... Yo estaba delante cuando hablamos con Bermúdez y el se comprometió a hablar con su equipo y no había problemas. Si nos lo hubieran prohibido diez días antes, con un margen de tiempo, nosotros cambiamos y no pasa nada. Lo que sucede después, para mi, no es admisible ni por la organización ni autoridades que se crean Billy ‘El Niño’.

Igual la organización quiso esperar a conocer las finalistas.

Claro, que la final de la Champion nunca es la misma, saben que dónde la hagan siempre se va a llenar el campo con las aficiones de los dos equipos... Este año era la final de murgas era diferente. Lo que no se puede es que este es el Carnaval más seguro del mundo y luego nos estén poniendo treinta mil pegas y con amenazas y con amenazas. Zeta-Zetas se sube al escenario coaccionado y tenemos que tener los mismo puntos que el resto. A nosotros nos lo comunican con tiempo y nosotros no hacemos nada de eso; no nos tachen de nada. La seguridad quizás que teníamos nosotros de gente para llegar hasta donde se quería con los propios concejales eran veinte personas, y algunos a lo mejor profesionales. ¡Qué excusas! Aquí lo que pasó es que alguien de la oposición se levantó y el resto la siguió, porque la intención no era levantarse; así de claro. Ahora que no se vengan a poner todos bien en la foto. Patricia dijo que sí y Tarife dijo que era parte del pueblo y él iba a salir. Aquí cuentan las cosas a media lengua. Aquí, las cosas claras que para el chocolate ya estoy yo.

¿Se sintió mal?

Es triste. Estamos en pleno siglo XXI. ¿Qué pasa, que vamos a volver a comisaría como me pasó a mi?

¿Y eso es murga lo que hace Zeta-Zetas, porque luego no se puede recrear en la calle?

Por actuar en la calle, apaga la luz y vámonos. Mira a cuántos kioscos le pide una murga si puede bajar el sonido y le responde que no porque pagan impuestos. ¿Dónde actúa entonces la murga, en Cortefiel como siempre? ¿Dónde están los escenario prometidos para las actuaciones de los grupos? ¿Por qué el cierre del Carnaval sigue siendo más de lo mismo y no hacen un festival pirotécnico? ¿Así acabamos el Carnaval de Interés Turístico Internacional? Yo no soy un huele huele sino que aporto ideas.

Tal vez no lo hacen por las quejas por los ruidos de fuegos.

Eso no quita para que si quieres hacer ese festival pirotécnico ajustado a las normas o hagas otra cosa. Tu ves el ‘Pobre de mi’, en Pamplona, y está lleno. Aquí no se hace nada.

¿Hubiera hecho el repertorio con las pantallas de Zeta-Zetas estando en Mamelucos?

Sí, por supuesto.

¿Y esa es la evolución de la murga?

No sé si es la evolución de la murga, pero es diferente, es distinto. Oye, no te cuadra... si vamos a hablar de contenido prefiero darme un punto en la boca, pero al margen de eso es una aportación diferente y es distinto. Si hay que seguir las tradiciones, ¿por qué no siguen los pasos de la Ni Fú-Ni Fá? Mírate el concurso de murgas infantiles... el espejo parece ser Zeta-Zetas y no lo digo con ánimo de nada.

¿Toño Ramírez estaría dispuesto a ponerse al frente de Zeta-Zetas?

No, para nada. Me he sumado a Zeta-Zetas para aportar, nada más. Estoy en el grupo de letrista.

¿El próximo año se ve con disfraz?

No, no lo creo.

¿Ya dejó las tablas?

No, todavía me acuerdo. Sé multiplicar (se ríe). Ellos tienen su junta directiva y no tengo ni idea de los planes de Javier Lemus.

Antes se recriminaba a Zeta-Zetas no tener letras, y este año tienen a Naara Hernández, Seid Plasencia, Santi Martel, Carlos Casanova y el propio Lemus.

Es un placer trabajar con ellos.

¿Y cómo se hace una letra con tantos y tan buenos letristas?

Aceptando lo que ellos consideran. Estamos en un estado democrático; es verdad que yo soy más quisquillosos. De hecho, alguna frase dije no y Javi la cambió.

¿Es partidario de dar un giro al concurso de murgas?

Soy más partidario y que todos nos sentemos a hablar, no limitarnos a mirarnos las caras.

¿Es partidario de un concurso insular?

Si lo hacemos como en Cádiz, sí, con unas previas, y se abre el abanico para todos, pero hay atreverse a poner el cascabel al gato en función a si le interesa a los políticos.

¿Dos temas en fase y una en final?

No, dos en fase y dos en final, pero yo recorto la final, con seis participantes. Debemos de pensar en el público que acude a la final, que a veces se convierte en un espectáculo infumable.

¿Qué opinión le mereció Mamelucos este año?

Me agradó como suena, pero no por lo de cañón. Fue aceptada la decisión de apostar por Samuel Fumero, yo lo dejaba al frente de la murga; no me disgustaron. El tema de los impuestos era más tema de final. Dentro de la interrogación esperaba más contenido, pero estuvieron más.

¿Cómo vive la situación que ha vivido Mamelucos?

Nunca me voy a alegrar de nada malo que le pase a ningún colectivo ni como grupo ni en lo personal. No es justo alegrarse del mal de nadie. No haré nunca leña del árbol caído.