El alcalde de la capital tinerfeña, José Manuel Bermúdez, asegura que "jamás voy a poder olvidar la negativa que ha dado el Puerto a la ciudad, porque cuando dice no al Carnaval se lo está diciendo a todo el municipio". "Es la primera vez que el Puerto le da la espalda a la ciudad", asegura el regidor municipal de forma categórica.

El regidor municipal valora de esta forma la nueva oferta que le hace llegar el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos González, a través del titular del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, a quien el propio Bermúdez le pidió que mediara para poder celebrar el Carnaval en junio. Así lo solicitó al término de la comisión Puerto-Ciudad celebrada el miércoles, donde el alcalde intentó sin éxito que Carlos González le cediera el suelo donde se celebra el concierto de Navidad para montar el escenario de los concursos y galas de las carnestolendas desplazadas por la pandemia.

"La intención del ayuntamiento fue celebrar el Carnaval en febrero, y luego en marzo, pero la sexta ola y la evolución de la pandemia impedían la celebración de los ensayos de los grupos del Carnaval, y por tanto hipotecaba la organización de los actos en esa fecha por que lo impedía la situación sanitaria". A partir de ahí, "nuestra primera opción siempre fue el recinto ferial. Sin embargo, "hace dos semanas nos dijeron que era imposible porque estaba ocupado".

Bermúdez sostiene que “la perspectiva, inasumible por parte de la ciudad, de alargar de manera indefinida una negociación en la que una de las partes no tiene interés en llegar a un acuerdo, me ha hecho dar instrucciones a los técnicos de Fiestas para que de manera inmediata se encuentre otro espacio que albergue gala y concursos del Carnaval”.

Por otra parte, ante la nueva propuesta realizada a última hora de la mañana por parte del presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, de la posibilidad de utilizar el Recinto Ferial, el alcalde sostiene que “llama la atención de que hace 15 días nos comunicaran la imposibilidad de alquilar esta instalación para los concursos y galas, por lo que tuvimos que buscar la alternativa de la dársena de Los Llanos, y ahora, de buenas a primeras, se pueda liberar de actividades y nos lo ofrezcan para el Carnaval”.

Para finalizar y como reflexión sobre la posición mantenida por la Autoridad Portuaria, Bermúdez anuncia que “renunciamos a desarrollar esa actividad en un espacio que es público, pero cuyo uso parece condicionado a la defensa de intereses políticos, en lugar de la defensa de los intereses de la ciudadanía y del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife, que es Fiesta de Interés Turístico Internacional”.

Por último, el alcalde lamenta que “no hemos recibido ni tan siquiera una llamada del presidente de la Autoridad Portuaria para reconducir esta situación, por lo que no podemos tolerar una falta de respeto a la ciudad, a la capital de Tenerife, a los chicharreros y chicharreras, a su fiesta más importante”, añadió el alcalde.