El concurso de murgas del Norte pareció celebrar ayer una fase añadida a las dos eliminatorias y final para dirimir en los despachos el veredictor final del certamen comarcal. Aunque al término de la final celebrada el pasado sábado en el Puerto de la Cruz se entregó el primer premio de Interpretación a Tiralenguas, y el segundo a Cascarrabias, y tercero a Trinkosos, estas dos últimas murgas intercambiaron en la mañana de ayer en el local de la murga portuense sus cartones, y trofeos, como consecuencia del error de cálculo de las puntuaciones del jurado.

La suma se decidió revisar porque en el cómputo final de las puntuaciones Cascarrabias y Trinkosos figuraban empatados a puntos, con un total de 349 cada uno. Por ese motivo, el sábado se decidió aplicar las bases, que regula que en igualdad de nota se desempata tomando en consideración quien tenga mejor puntuación. De ahí que se diera el segundo a Cascarrabias y el tercero, a Trinkosos. Ya en los despachos se decidió revisar el cálculo y surgió ahí la sorpresa: Trinkosos tenía tres puntos más sobre el cómputo que se había realizado de la final, pasando de los 170 puntos a los 173 asignados en la revisión.

Por este motivo, el concejal de Fiestas avisó la noche del lunes a Trinkosos y citó en la mañana de ayer a Cascarrabias para que acudieran a una reunión con los premios... Los de La Orotava acudieron con el trofeo y el cartón y los del Puerto, solo con el cartel del premio, por lo que decidieron ir al local de Cascarrabias y ahí se intercambiaron los premios.

En las redes sociales, miembros del jurado hicieron constar que ellos facilitaron la puntuación pero la propia organización les pidió que no estuvieran durante el cómputo final, mientras sí estaban representantes de murgas, en nombre de la federación. Fuentes de la organización explicaron que la productora encargada de elaborar el jurado pidió que no estuvieran en el recuento porque el tribunal que había estado el año pasado en el concurso se había negado a entregar sus móviles, y de esta forma se quería garantizar la total confidencialidad del veredicto final.

E Aceptan los ceros. Cuando parecía que se había zanjado la polémica de las puntuaciones, surgió entonces otro escollo. Alguien de la federación advirtió de la posibilidad de que algún jurado puntuara con cero en los apartados de humor y/o crítica en contra de lo que dicen las bases, que precisan expresamente que cada uno de los cinco apartados deben ser puntuados del 1 al 5.

Sin que se entregaran las puntuaciones, a primera hora de la tarde el concejal de Fiestas del Puerto, Alberto Castilla, celebró una reunión con miembros de la organización en la que se verificó que había puntuaciones de cero, en contra de lo que dicen las bases. Fue una reunión maratoniana, que se prolongó hasta casi las cinco de la tarde, cuando se decidió convocar a todos los miembros de la federación de murgas y reunirlos a todos los miembros del jurado. Ya en el salón de plenos del ayuntamiento, la intervención de la jurado de murgas Raquel García resultó esclarecedora para los allí presentes. Mientras los murgueros pedían explicaciones de por qué se había votado cero cuando lo prohíben las bases, la que fuera letrista de Clónicas y Burlonas, entre otras murgas, explicó que el jurado no podía valorar la crítica o el humor cuando no existía en la letra. La explicación convenció a la mayoría de los presentes, que dieron por bueno la subsanación del error de cálculo de la mañana y zanjaron el debate sobre los ceros.

En el Norte se arrastra la puntuación de fase a final. Tiralenguas gana con 354 puntos, seguido de Trinkosos, tras la corrección, con 352, y Cascarrabias, con 349. Cualquier cambio en las puntuaciones de los ceros podría haber variado el nombre del ganador. Pero Raquel García convenció al auditorio y zanjó la discusión. Cascarrabias estudia si caben acciones legales que salgan en su defensa.