La alcaldesa Patricia Hernández reiteró anoche su apuesta por los barrios. Lo hizo en la campaña electoral, cuando se llevó al candidato a presidente Pedro Sánchez a Ofra y anoche, en una visita improvisada con el concejal de Fiestas, Andrés Casanova, quiso cumplir la palabra que dio a los grupos de La Salud. "Si soy alcaldesa, será aquí donde venga por primera vez". Y así fue anoche.
A las ocho de la noche comenzó su periplo en el mercado de La Salud por los locales de las murgas infantiles Pita-Pitos y Rebeldes. Rápidamente los alma mater de la murga que dirige Óliver Yanes salieron corriendo para subirse a la tarima de Caña Dulce. Allí, un histórico Julio Alfonso Cucú. Antes de que Juani Febles marcara el compás, un alto para un refrigerio que recordó la cercanía que caracterizó la gestión de Manuel Hermoso. Su sucesora, tres décadas después -la primera del PSOE-, compartió un bocata de pollo y su cola con los componentes antes de que la Caña Dulce de Juani engarzaran perlas de amor al Carnaval con una exquisita interpretación.
Patricia Hernández volvía a subir a la tarima de las agrupaciones, como las que militó con Machu Picchu. Cuando ella salía, al frente de Caña Dulce, la formación que presidió Pedro Ortega, hacía historia con Marcelo Santana El Gallo, los eternos rivales, siempre ganadores. Ellos en Interpretación, y la alcaldesa, como componente de Machu Picchu, en Presentación con fantasías del reputado Leo Martínez.
La comitiva de la alcaldesa continuó a Burlonas, de Adela Peña;
Trabachones, que inician etapa con Yone Expósito.
Y Zeta-Zetas, de Javier Lemus. Tanto las murgueras como Zeta-Zetas agradecieron la visita de Patricia Hernández por cumplir su palabra. "Es la primera vez que viene a vernos el alcalde; en este caso la alcaldesa", coincidieron.
En Burlonas, lección murguera de Patricia Hernández -con lección incluida de qué cara poner cuando recibe un recado-. Sorprendió la alcaldesa al recordarle la primera vez que le cantaron Burlonas, hace cuatro años, en la oposición.
Trabachones hizo los honores y Zeta-Zetas... le levantó un monumento.
Ensayo para pasar toda la noche con los de Lemus. Cerró el bautizo murguero al calor de la comparsa madre del Carnaval, Rumberos.
