Dos de las diez comparsas inscritas inicialmente para el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife 2020 han confirmado su ausencia: la primera, Río Orinoco (1988), presidida por Antonio Socas, que en las últimas ediciones ha protagonizado un espectacular cambio en la calidad y fuerza de su repertorio de la mano de su coreógrafo Dani Baute. La falta de componentes ha pasado factura por el compromiso que supone militar en una formación de cuerpo de baile y parranda. No obstante, la sociedad continúa su oferta como comparsa, aunque no concurso, con un ensayo a la semana, así como participando en cuantas actuaciones les inviten.

Junto al año sabático que ha decidido tomar Río Orinoco para el Carnaval de los coquetos 50 -lema de la próxima edición-, la comparsa Valleiros también ha comunicado a la organización su imposibilidad de concursar la próxima edición. Su presidente, Isauro Rivero, explica que desde junio han buscado componentes desde sus redes sociales para volver a los escenarios de los certámenes oficiales después de su ausencia el pasado febrero, pero insiste en que la falta de integrantes ha acabado por pasarle factura a la comparsa. Fundada en Valle de Guerra en 1979, recuerda que en los últimos 32 años -y llevan 41 de fundación- han estado solicitando un local de ensayo, hasta el punto que la misma sociedad ha alquilado una sede que le supone un desembolso mensual de 600 euros. Con el desconsuelo de no poder volver a concurso, Isauro Rivero mantiene su empeño en mantener viva la pasión y el cariño que representa Valleiros tanto para el Carnaval de Tenerife como en participar para el pueblo que representa, y trabajará por volverla a hacer realidad.