Cinco ayuntamientos del Archipiélago contratan obras a la empresa de ‘Mon’

Recién estrenada la primavera de 2021 resultó ya evidente para las altas esferas de la Guardia Civil cercanas al constructor Ramón Tejera de León Mon que la investigación puesta en marcha por el Servicio de Asuntos Internos del Instituto Armado podía comprometerles seriamente. Eso motivó que el hilo que había unido a ambas partes desde 2008 quedara roto. Mon tuvo que rehacer su estrategia operativa para mantener al menos una parte de los ingresos que le propiciaban las obras públicas. Su presencia en licitaciones de ayuntamientos canarios se multiplicó entonces y consiguió adjudicaciones en cinco de ellos.

El caso Cuarteles investiga si el empresario se garantizó con prebendas que sus empresas –Angrasurcor sobre todo, Canarycork, Impermecork y Solocorcho– fueran elegidas en la gran mayoría de las obras licitadas por la Guardia Civil entre 2014 y 2019. En dicho periodo resultó adjudicatario en 193 ocasiones para realizar trabajos de rehabilitación y reforma para trece comandancias y órganos centrales del cuerpo.

La suma de las cantidades consignadas en todas esas convocatorias que resultaron exitosas para los intereses de Mon alcanza los 2,96 millones de euros. Además del empresario, tienen la condición de investigados el teniente general Pedro Vázquez Jarava y el coronel José María Tienda, ex jefe de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife, destituido de su cargo este mismo mes.

El primero de ellos ya alcanzó la edad de retiro, pero estaba al frente de la Subdirección General de Apoyo de la Guardia Civil en los años que se investigan. Este organismo era el que tenía la última palabra a la hora de escoger a las empresas. El segundo, Tienda, se convirtió en el mejor cliente de Mon, el 31% de los ingresos por obras realizadas para el Instituto Armado se desarrollaron en la provincia tinerfeña.

Presencia municipal

De mayor a menor importe de las obras, Teror (193.720 euros), Breña Alta (127.692), Puntallana (42.474), Barlovento (42.312) y Los Llanos de Aridane (33.271) fueron las localidades que se decantaron por Angrasurcor, la sociedad limitada creada por Tejera en diciembre de 2013 y que jamás ha depositado sus cuentas en el Registro Mercantil de Las Palmas.

Mon lo ha intentado también en San Bartolomé y Arrecife, en Lanzarote, y en Gáldar, en Gran Canaria, pero la competencia que, según las pesquisas realizadas en el caso Cuarteles, no tuvo cuando el licitador era el Instituto Armado, en este caso sí presentó mejores ofertas. Lo mismo le ocurrió cuando se presentó a una convocatoria del Cabildo de Lanzarote.

En el caso de Los Llanos, la decisión del consistorio –octubre de 2018– pudo estar aún influida por la relación que se investiga en un juzgado de Madrid. En la localidad palmera no pagó la Guardia Civil. El dinero (33.270 euros) salió de las arcas municipales, pero porque el inmueble que ocupa allí el Instituto Armado es parte integrante del patrimonio local.

Aparte de ser la localidad canaria en la que más abiertas ha encontrado las puertas Mon en los últimos años, Teror es también protagonista de la última de las licitaciones que se ha anotado el constructor. El día 6 de este mismo mes se le adjudicaron los trabajos de reforma del local que ocupa la Asociación de Vecinos Guayasen por 18.691 euros.

Siguiendo un orden cronológico decreciente, la villa mariana también eligió a Angrasurcor SL en diciembre del pasado año para ocuparse de la rehabilitación de la cancha deportiva de Arbejales (45.054 euros). El más cuantioso de los encargos fue la impermeabilización de las cubiertas de varios centros educativos del municipio. El volumen de la licitación (129.874 euros) hizo aconsejable dividirla en dos lotes. De ambos resultó adjudicatario Tejera de León en una decisión adoptada el último mes de 2021.

El consistorio terorense es el que mayores ingresos ha propiciado a Tejera de León

En Breña Alta puso el pie Mon por vez primera, en lo que a obra pública se refiere, en diciembre de 2020. Su oferta para salvaguardar de los efectos de la lluvia el polideportivo municipal mediante la impermeabilización de su cubierta –42.709 euros– fue la mejor valorada. En agosto de 2021, acometió un proyectado de corcho en el mismo inmueble, lo que le reportó otros 42.424 euros. 

La última vez en que se cruzaron los caminos de Ramón Tejera y el consistorio breñusco fue en mayo del año pasado. En esa ocasión, Angrasurcor se hizo cargo, 42.559 euros mediante, de la insonorización del campo de lucha.

De nuevo evitar daños provocados por la lluvia fue el encargo por el que pujó el empresario lanzaroteño en Puntallana. Impermeabilizar centros de enseñanzas de la localidad motivó la convocatoria, que se decantó del lado de Mon en julio de 2022. Su oferta fue la más económica, 42.474 euros. La obra fue prácticamente idéntica a la desarrollada meses antes –abril de 2021– en la cubierta transitable del Pabellón Deportivo de Barlovento. Tanto es así que la oferta ganadora presentada por Angrasurcor se parece mucho a la del caso anterior, 42.312 euros.

Aparte de estas experiencias municipales, la constructora investigada se hizo con otra obra después de que la Guardia Civil le cortara el grifo. También se trató de una impermeabilización, en este caso de la cubierta del edificio principal del castillo de Paso Alto, en Santa Cruz de Tenerife.

El organismo convocante en esa ocasión –el fallo se produjo el último octubre– fue la Jefatura de Asuntos Económicos del Mando de Canarias (Ejército de Tierra), que validó una baja temeraria para adjudicarle el trabajo por 60.453 euros.

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