El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, valoró este miércoles la «sensibilidad» e «implicación» del Parlamento europeo para que el Archipiélago, en condición de Región Ultraperiférica (RUP), sea elegida como sede de la Agencia Europea del Turismo.
En declaraciones a los periodistas tras reunirse con la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, Torres calificó de «importantísima» la reunión, porque no es normal que reciba a un presidente autonómico y además muestre su apoyo a la iniciativa de Canarias, que está a su vez apoyada por el Gobierno español y todas las RUP.
Torres destacó que «la última decisión» la tendrá el Parlamento europeo, y por eso este encuentro «es otro paso más» para lograr el éxito de la candidatura isleña. «Me voy satisfecho», agregó.
Además, Torres dijo haber arrancado el compromiso de que cualquier modificación del Tratado de la Unión Europea (UE) «seguirá manteniendo» vigente el artículo 349 que reconoce los criterios de lejanía y aislamiento de las RUP. El presidente también mostró su voluntad desde la Presidencia de las RUP y la propia presidencia española de la UE, que coincidirán en el segundo semestre del próximo año, de «sacar adelante» el pacto de asilo y migraciones que incluya la «corresponsabilidad migratoria» de los Estados miembros.
Torres alertó en Bruselas del riesgo de «devaluar» o «diluir» el concepto de región ultraperiférica (RUP) si se asimila a otras realidades territoriales con diferentes condiciones, como zonas rurales de montaña u otros territorios insulares que en ningún caso son ultraperiferia. «La ultraperiferia solo tendrá éxito en Europa desde la óptica de la adaptación, de la modulación, de la excepción de las políticas en estos territorios. Cuando se pone sobre la mesa el ánimo armonizador, supone un esfuerzo titánico para la ultraperiferia que nos obliga constantemente a alzar la voz», aseguró Torres en su discurso tras tomar posesión como nuevo representante de turno de las RUP.
Así, el presidente de Canarias señaló que el proceso de actualización de los tratados en el que está inmerso la Unión Europea no puede suponer un riesgo para las RUP que conduzca a esa «devaluación» y defendió la continuidad de un estatuto jurídico diferenciado para la ultraperiferia. Ese tratamiento específico se basa, según dijo Torres, en razones de renta per cápita, alejamiento, aislamiento y menores recursos, sin haber «ningún otro artículo del Tratado de Funcionamiento» que se iguale a lo que dispone el 349 para las RUP. «Tenemos que preservar ese artículo», ahondó.
Además, Torres expresó su deseo de que el Archipiélago acoja una cumbre que reúna a las RUP junto a mandatarios y jefes de Estado y de Gobierno de España, Francia y Portugal. «Sería un símbolo de apuesta clara por estos territorios», subrayó.
