El vicepresidente y consejero de Hacienda del Gobierno de Canarias, Román Rodríguez, ha asegurado que los miembros del Ejecutivo creen que no han dejado a nadie "en la cuneta" en lo que depende de un presupuesto público, si bien ha reconocido que "no hacemos milagros". Rodríguez ha hecho estas declaraciones tras entregar el proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para 2023 al presidente del Parlamento, Gustavo Matos, que llegará a 10.180 millones de euros, un 11,9 % más que este año, con un gasto social que se incrementará en un 9,46 %.
Ha insistido en que los cuatro presupuestos elaborados por los cuatro partidos que forman el Gobierno regional tienen una orientación en defensa de la mayoría de la población, y durante su intervención ha considerado que a la oposición no le resultará fácil presentar enmiendas a la totalidad. En la presentación del proyecto de ley, el vicepresidente y consejero ha hecho referencia al primer presupuesto elaborado por este gobierno, que ascendió a 7.855 millones de euros, un 29,6 por ciento inferior, a pesar de que la economía aquel año era "más importante" a nivel cuantitativo que lo será la de finales de 2023.
Román Rodríguez también ha insistido en que en los últimos cuatro años se ha incrementado de forma continua el gasto social, de forma que se pasará de los 5.699 millones de 2019 a 7.478 millones de euros en 2023. Así, para el próximo ejercicio ha incidido especialmente en los crecimientos del Servicio Canario de Salud con 3.793 millones, 331,7 millones más; Educación, que gana 189 millones hasta sumar 2.326 millones --el 4,8% del PIB estimado--; Derechos Sociales, que sube un 15,38% hasta los 669 millones; Transición Ecológica, departamento que más sube con un 20,71% más hasta llegar a los 205,8 millones y Economía (+19,1%), que alcanza los 121,2 millones.
Rodríguez ha destacado la "orientación social" de las cuentas autonómicas, la protección de los sectores productivos y el impulso a la inversión con un diseño "riguroso y solvente".
