Coalición Canaria (CC) contrapuso ayer el «triunfalismo» que a su juicio exhibe el Gobierno de Canarias a «la dura realidad de cientos de empresas que se han visto obligadas a cerrar y que no han visto una salida en los fondos gestionados por el Ejecutivo canario». Los nacionalistas echan en falta «una planificación global del Gobierno de Canarias para hacer frente a la nueva realidad económica, que solo el mes pasado costó el cierre de hasta 373 negocios en las Islas y la pérdida de más de 10.300 empleos».
«Esta es la otra realidad, la de muchos emprendedores y empresarios que no han podido superar el impacto de la crisis económica por la covid ni el incremento de la inflación y que han estado durante los dos últimos años remando a contracorriente». CC defiende un paquete de medidas que «vaya más allá de simples parches o medidas coyunturales porque no se ha superado las consecuencias del impacto de la pandemia y ya están inmersas en una recesión». En este contexto, insisten en que Canarias «tiene herramientas como el REF que nos permitirían tomar medidas económicas propias para ayudar a las familias canarias y al tejido empresarial canario, entre ellas una bajada de impuestos o la compensación al 100% de los costes tipo para el transporte de mercancías tanto entre islas como entre Canarias y península y el resto de países de la UE».
Precisamente ayer se supo que el Gobierno de Canarias está evaluando la posibilidad de incluir ayudas directas y bajadas fiscales selectivas para el presupuesto de 2023, explicó el vicepresidente y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, en el Parlamento, en donde la oposición le pidió una rebaja general de impuestos. La diputada de CC Rosa Dávila reclamó rebajar coyunturalmente el IGIC del 7% al 5%, ante lo que Román Rodríguez respondió que si se lo piden los ayuntamientos y cabildos, a los que se destina el 58% de la recaudación del IGIC por un 42% para la Comunidad Autónoma, está dispuesto a entrar a discutirlo. «Pero ni un solo alcalde ni alcaldesa me lo ha pedido», aseguró.
