Coalición Canaria (CC) quiere reforzar el blindaje que la enmienda transaccional, –presentada por Nueva Canarias (NC) y aprobada la semana pasada en el Congreso de los Diputados–, otorga al plátano de Canarias respecto a la posibilidad de quedar excluido del cumplimiento de algunos artículos de la ley de Cadena Alimentaria, que el sector considera lesivos para la supervivencia de la actividad en el Archipiélago. El objetivo es evitar que el texto ya aprobado, –que contempla la posibilidad de que a lo largo del año parte de la producción pueda venderse a pérdidas si el mercado lo hace necesario–, cambie durante su tramitación en el Senado. Para ello, la formación volverá a solicitar que se plasme una excepcionalidad expresa del plátano canario de aquellos apartados que obligan a vender siempre por encima de los costes de producción.
El senado autonómico, Fernando Clavijo, afirmó ayer que con este movimiento se trata de evitar que el Ejecutivo central tenga la tentación de presentar enmiendas de última hora y cambiar la ley, como ya lo hizo la vez anterior». Clavijo recordó que el texto aprobado en el Congreso «salió adelante en contra del parecer del Gobierno de España», cuyos grupos alegaron después de rechazar la propuesta que su negativa había sido un error y trataron de repetir la votación.
Aunque la enmienda ya aprobada no otorga al plátano de Canarias una excepcionalidad en el cumplimiento de ciertos artículos de la norma, sí que cumple con las exigencias del sector. Establece un régimen particular para esta producción, en el que posibilita que las ayudas se incluyan en los costes de producción y que el precio se establezca a partir de la media de ventas anuales de todos los clientes. Aún así, Clavijo reiteró que presentará nuevas enmiendas para «evitar presiones de otros lobbies y tentaciones del Gobierno» y además «tener la certeza de que el plátano canario, único y singular en la Unión Europea (UE), se salve».
El expresidente del Gobierno regional aseguró, durante una visita a la sede de la Sociedad Agraria de Transformación FAST en La Orotava, que el derecho de la UE «nos permite articular estas excepcionalidad para la supervivencia del sector», ya que para las producciones canarias «no pueden aplicarse los mismos criterios que para las grandes producciones continentales». Más ahora que el sector se ha visto muy afectado por la crisis volcánica de La Palma, una isla que aglutina el 38% de la producción, y que ha visto como muchas hectáreas de plataneras han sido arrasadas por la lava.
El sector platanero canario lleva más de un año batallando para quedar al margen de varios artículos de la ley de Cadena Alimentaria, que prohíbe vender los productos por debajo de los costes de producción del agricultor. Sin embargo, los productores isleños se ven obligados a comercializar buena parte de su fruta a pérdidas para poder competir con la banana en el mercado peninsular.
Domingo Martín, presidente de la Asociación de Productores de Plátano de Canarias (Asprocan), entiende que a través de la enmienda transaccional aprobada «podemos esquivar los problemas que tenía la ley» que les hubieran obligado a dejar de comercializar entre un 30% y un 80% de la producción, lo que hubiera supuesto la ruina para el sector.
Aunque insiste en que el principio de la ley es «bueno», ya que se basa en que se pague al agricultor al menos el precio del coste de producción, asume que «en una economía de libre mercado es una utopía», ya que para ello «las producciones deberían ser siempre fijas y no lo son» Por ello, recalcó que si existe una producción elevada «hay que venderla a cualquier precio» y que esto siempre será mejor que «dejarlas aquí para que entre libremente la banana». Ahora, sus esperanzas están puestas en que la tramitación en el Senado no desvíe el texto ya aprobado en el Congreso.
El secretario general insular de CC de Tenerife, Francisco Linares, reiteró que los nacionalistas «seguirá luchando» al lado del sector, ya que según dijo son los únicos «que tenemos la libertad y no la obediencia divina» que lleva a representantes canarios de otros partidos «a votar en contra de los intereses del plátano canario».
Linares subrayó que «Canarias es una tierra singular y única» al igual que el plátano producido en las Islas, lo que hace necesario «una serie de ayudas y contemplaciones específicas que este Gobierno de España no entiende o no quiere entender».
