El Consejo de Ministros decidió ayer habilitar una partida de 30 millones de euros para combatir los crecientes índices de pobreza y exclusión social que sufre el Archipiélago. Este dinero, que el Estado dará a la Comunidad Autónoma en forma de subvención, es parte del presupuesto del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, que dirige la podemita Ione Belarra. «Esto sí que es una agenda canaria», se congratuló la consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, la también representante de Podemos Noemí Santana, que justamente ayer se sometió al escrutinio de la oposición durante una interpelación parlamentaria en la que la presidenta del PP en las Islas, María Australia Navarro, la criticó con dureza por su «incapacidad» para hacer frente a la crisis socioeconómica.

Detrás de la interpelación estaban los últimos datos de la Encuesta de condiciones de vida del Instituto Nacional de Estadística, que muestra cómo la pandemia ha sumido en la pobreza extrema a otros 149.000 canarios; que ya son 790.000 los isleños en riesgo de pobreza o de exclusión social; o que 365.600 personas que tienen la suerte de no haber caído en una situación tan grave sí se ven en problemas, en cambio, para llegar a fin de mes. En este sentido, los 30 millones que transferirá el Estado para el plan de lucha contra la pobreza «son fundamentales para financiar proyectos que ayudarán a hacer la vida de la gente de Canarias un poquito mejor y más digna», explicó la consejera de Derechos Sociales, que hizo hincapié en que por primera vez estos fondos estarán en las arcas de la Comunidad Autónoma antes del verano –antes de agosto–, cuando lo habitual es que lleguen hacia finales de año.

En el debate en el Parlamento regional, Santana había reconocido que los esfuerzos de su Departamento para paliar la situación de las familias isleñas no han sido suficientes a tenor de la gravedad de la crisis, pero aseguró que ahora son unas 20.000 las personas que están «protegidas» –reciben algún tipo de ayuda– y que antes eran en torno a 5.300. En un bronco intercambio de opiniones con Australia Navarro, la representante del Gobierno presidido por Ángel Víctor Torres subrayó sentir «pena» por que el PP «dedique la mayor parte del tiempo a hablar de lo mala que es la consejería de Podemos, sin dar alternativas ni propuestas». El argumento terminó por encender los ánimos de la líder de los populares canarios, que le recordó a Santana que la labor de la oposición es fiscalizar y la del Ejecutivo, tomar decisiones. «Ha sido usted incapaz y, además, arrogante», espetó Navarro, que le reprochó a la consejera que «ni siquiera» haya puesto en marcha «un plan de choque ante el desastre social que se vive en Canarias».

Santana tiró de cifras para tratar de desmontar las acusaciones de Navarro y afirmó que en los dos últimos años, por ejemplo, se ha reducido un 20% el tiempo para resolver las solicitudes de pensiones no contributivas y que por primera vez se ha dado un complemento a las más de 50.000 personas que las reciben.