Entre el 15 de junio y el 28 de julio, 58.000 empresas canarias podrán solicitar parte de los 1.144 millones de euros de ayudas directas remitidas por el Estado a Canarias. Dicha suma supone el 16% de las aprobadas para todo el país el pasado marzo, lo que convierte a las Islas en la región que encabeza la recepción de fondos para sacar el pozo a sus empresas. El decreto que regula el acceso a estas subvenciones se publica hoy y destina más de la mitad –720 millones de euros– de la cantidad global a los autónomos y las empresas de menor tamaño, que suponen más del 95% del tejido productivo de las Islas.

A la vigesimoprimera fue la vencida. Han hecho falta 21 intentos de redacción para mantener la norma dentro de los límites de la legalidad y dotar al reparto de la agilidad necesaria para que el dinero llegue cuanto antes, según anunció ayer el Gobierno de Canarias. Más de dos decenas de tentativas dan idea de la complejidad de la labor. La intención manifestada ayer por el presidente es comenzar a ingresar el oxígeno financiero mucho antes de que finalice el plazo de solicitud por parte de los negocios.

Torres detalló los cuatro tramos de ayudas a conceder en función del tamaño de la empresa. «Los autónomos que tributan por estimación objetiva», matizó la consejera de Economía, Elena Máñez, recibirán un máximo de 3.000 euros. Es el límite que establece la legislación estatal y, aunque son muchos los extremos del decreto que se sitúan en el borde mismo de la legalidad para extraer el máximo rendimiento a los fondos –«un ejercicio de máximo autogobierno», lo denominó el vicepresidente Román Rodríguez–, esa barrera no pudo derribarse de ninguna manera.

Las empresas de entre uno y diez empleados podrán aspirar hasta a medio millón de euros; aquellas que mantengan entre once y 49 puestos de trabajo, a 1,8 millones de euros, y las que cuenten al menos con 50 asalariados, a cinco millones de euros. Rodríguez, también consejero de Hacienda autonómico, desagregó los 1.144 millones atendiendo a esa clasificación: 70 millones de euros irán a parar a autónomos sin empleados; 650 millones, a las empresas de entre uno y diez empleados; 212 millones, a las de entre 10 y 49, y otros 212 millones a las que cuenten con una cifra de trabajadores superior al medio centenar. En cualquier caso, esta distribución prevista no supone la conformación de compartimento estancos. Es decir, si atendidas todas las peticiones, sobra dinero en algún escalón, se destinará el remanente a aquel o aquellos en los que la previsión se quedó corta.

«Esto no está hecho a ojo, el cálculo es posible porque tenemos una Agencia Tributaria y una autonomía fiscal que nos permiten contar con los datos necesarios». Así lo recalcó el vicepresidente para incidir en que la distribución de los fondos responde a la estructura del tejido productivo isleño.

Los potenciales receptores de estas ayudas directas tienen que haber padecido caídas de la facturación de al menos el 30% en 2020. Además, las negociaciones del Ejecutivo canario con las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y Economía, Nadia Calviño, permitieron abrir la convocatoria a todos los sectores excepto el financiero, y dar entrada a algunos negocios que tuvieron un resultado negativo en 2019. Europa prohíbe destinar dinero público a empresas zombis, aquellas que ya solo respiran de manera asistida y hace tiempo que dejaron de ser un negocio en sí.

Las organizaciones empresariales alertaron desde el primer minuto de la casuística que dejaba fuera a compañías de manera injusta. Por ejemplo, Máñez mencionó a las afectadas por «la quiebra de Thomas Cook» o a las que sufrieron «una plaga si hablamos de empresas agrícolas». La colaboración con los agentes sociales, a los que Torres agradeció su labor, ha sido intensa en los últimos meses.

Las cámaras de comercio volverán a asesorar y tramitar las subvenciones como ya hicieron en los meses pasados con la línea de 84 millones de euros que estableció el Gobierno canario con fondos propios de la comunidad autónoma. «En aquella ocasión se contrató a 105 personas y entendemos que ahora serán más, pero estamos terminando de cerrarlo», expuso la consejera de Economía.

Román Rodríguez destacó la intensidad de las ayudas en las Islas. «En Baleares hay un máximo de 500.000 euros y aquí, de cinco millones», destacó. Al respecto, el presidente Torres incidió en la «justicia» de que las Islas hayan recibido la mayor suma de todas las regiones. «Algunas parecen que no lo han entendido», expuso tras recalcar que el impacto que la pandemia ha tenido sobre la economía del Archipiélago es el mayor de toda España.