La directora general de Inclusión y Acción Humanitaria del Gobierno del Estado, Maite Pacheco, generó ayer mucha polémica al afirmar que el informe elaborado por técnicas del Ayuntamiento de La Laguna sobre las condiciones higiénico-sanitarias del campamento de Las Raíces no se ajusta a la realidad y puede estar manipulado. Así lo planteó en declaraciones a COPE Canarias, donde reconoció que no se lo ha leído. Para Pacheco, el mencionado análisis parecía que tenía “bastante cargadas las tintas”. No obstante, las redactoras se limitaron a exponer lo que vieron y las carencias de las instalaciones según la normativa vigente. El concejal de Bienestar Social de La Laguna, Rubens Ascanio, calificó el ataque a las técnicos de “ridículo e irresponsable”. Ascanio (Podemos) y un policía local acompañaron a dichas trabajadoras en la visita al recinto.

La directora general está “absolutamente satisfecha” con la gestión de la ONG Accem en el campamento. “Todo lo que usted me dice está bastante manipulado”, indicó al periodista Mayer Trujillo. Justificó que desconoce el estudio en que tiene la responsabilidad sobre toda España y ahora existen 100.000 migrantes acogidos en todo el país. Pacheco dijo que, a pesar del supuesto carácter tendencioso del texto, “se han tomado medidas”, para añadir después que “sería bueno contrastar” el mismo con la realidad, pues “no se corresponde” con la misma. “Muchas cosas que se dicen se refieren” al asentamiento exterior que hay por fuera del recinto gestionado por Accem. Pero, según pudo ver EL DÍA, en el documento solo se refieren al mismo en un pequeño apartado al final del texto y de forma diferenciada del análisis que se llevó a cabo del interior.

Según Pacheco, “no hay gente dentro pasando hambre”. En su opinión, resulta difícil la atención a un número elevado de personas de diferentes etnias, culturas, idiomas, que se hallan en un estado emocional complicado, así como también afectados desde el punto de vista psicosocial y jurídico. “Esto pasa en todos los lugares donde se convive”, apuntó la directora general. Tras los diferentes conflictos que ha habido en las instalaciones, comentó que “el último fue una pequeña reyerta”, en referencia a una batalla campal en la que hubo varios heridos de consideración y nueve detenidos, entre marroquíes y subsaharianos. Ante la falta de transparencia con los medios, que no pueden entrar en dicho recurso, respondió que han entrado todos los senadores, diputados y las organizaciones de derechos humanos que han querido. Se excusó en que ella no marca la política de comunicación, pero también aludió a la importancia de respetar la intimidad de los migrantes. Comentó que “a los medios les falta la información fehaciente”, supuestamente cuando recogen las quejas de los usuarios.

Ascanio respondió que “el Ministerio [de Migraciones] no puede justificar un minuto más la nefasta gestión humanitaria de este ‘campo de concentración 2.0’ y, encima, cargar contra el municipio que es rehén de esas decisiones, diciendo, además, que nos ocupemos de las personas que no soportan esta situación”. “Es simplemente vergonzoso, gobierne quien gobierne en Madrid”, afirmó el primer teniente de alcalde lagunero. Para Ascanio, “seguiremos exigiendo el cierre de este espacio” y pidiendo “el modelo alternativo que hemos ofrecido; seguiremos exigiendo que el Ministerio cumpla con los municipios o que nos dé las competencias y los recursos que ellos están demostrando que no saben” administrar.