El abogado de la exempleada de hogar de la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, y su pareja, el periodista Carlos Sosa, advierte que llegará al Supremo para que el alto tribunal se pronuncie sobre las circunstancias del caso, especialmente en relación con las cuatro transferencias bancarias equivalentes al salario de Simona Chambi y que en el juicio laboral celebrado en marzo Rosell calificó de “regalo”, sin que estas cantidades fueran declaradas como donaciones ni se acreditase que Chambi estuviera dada de alta en la Seguridad Social. El letrado Federico Vicente considera “vergonzoso” que la sentencia pasara por alto este asunto, entre otros.

Hasta que llegue ese momento, Vicente ha recurrido a la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) el fallo de la jueza del Juzgado número 7 de la capital grancanaria que absolvió a Rosell y Sosa del despido improcedente del que les acusada la ciudadana boliviana que trabajó para ellos en varios periodos entre 2011 y 2020. La sentencia se hizo pública apenas 24 horas después de la vista, lo que ha causado estupor y cierta indignación en el abogado y su clienta. “Hemos recurrido porque aquí hay cosas que no son normales, no entendemos que se haya emitido un fallo en 12 horas después del juicio cuando el periodo medio en estos casos es de dos meses y dando por probados hechos que en absoluto lo están”, cuestiona el representante legal.

El letrado pide que se reconozca que su clienta prestó servicios en la casa de Rosell como empleada de hogar en los periodos entre el 15 de mayo de 2012 hasta el 30 de noviembre de 2014, sin contrato escrito, y desde el 12 noviembre de 2015 hasta el 16 de julio de 2020, con contrato, percibiendo 430 euros netos mensuales y se declare nulo el despido.

Vicente teme que el TSJC dé carpetazo al asunto, por lo que avisa que recurrirá al Tribunal Supremo para que dictamine si pagar cuatro meses un sueldo de la forma que hizo Victoria Rosell se puede considerar un “regalo”.