El nuevo Plan de Canario de Inmigración que empieza a elaborar el Gobierno regional y que lidera la Universidad de La Laguna consistirá “en ordenar y coordinar las políticas migratorias, facilitar la inclusión y la integración de las personas migrantes y todo lo que tenga que ver con la convivencia intercultural y la acogida”, señaló ayer el director general de Derechos Sociales, Javier Bermúdez. De este modo, el Gobierno canario quiere establecer un marco de actuación que dé respuestas a futuras crisis migratorias, dadas las múltiples carencias y críticas que está teniendo la gestión de la actual, que no obstante, es competencia del Estado. Bermúdez sostiene que este plan va más allá de la actualidad de la inmigración, que es la llegada de migrantes irregulares por vía marítima, pues se trata de una estrategia “más global para mejorar la política migratoria”, donde incluso se reformulará el Foro Canario de la Inmigración.

El director general de Derechos Sociales recalca que aún están en una fase exploratoria trabajando con la Universidad de La Laguna, para desarrollar un marco y unos objetivos en el diseño de este plan, que actualizará el vigente, que data de 2008. Esta propuesta estará participada por las entidades sociales, ONG, todas las instituciones públicas isleñas y el Estado, o la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

Ayer se llevó el avance de este plan al Foro Canario de la Inmigración, donde se aprobó su desarrollo. Bermúdez calcula que concluir esta estrategia tardará en torno a un año.

La consejería que dirige Noemí Santana quiere que Canarias sea un referente en Europa en la gestión de las crisis migratoria, y por ello se proponen establecer “un modelo de acogida digno, con corresponsabilidad de todos lo actores autonómicos, estatales y la UE, y que se caracterice por defender los derechos humanos”, de modo que en Canarias “no se cometan los mismos errores”, afirma Bermúdez.