El presidente canario, Ángel Víctor Torres, comparecerá hoy en el Senado para exponer la situación de la crisis migratoria que atraviesa el Archipiélago sin haber logrado firmar el gran pacto político y social con el que quería reforzar su postura para reclamar que no se convierta a Canarias en una cárcel de migrantes. El Ejecutivo pretendía con este acuerdo presionar al Ejecutivo de Pedro Sánchez y a la Unión Europea (UE) para que autorizaran las derivaciones de los miles de personas que han llegado en pateras y cayucos a las Islas.

A pesar de que el Gobierno regional había anunciado que su intención era que Torres presentara el manifiesto –firmado por líderes políticos, agentes sociales y económicos, cabildos, ayuntamientos, ONG y la Diócesis de Canarias–, durante su comparecencia en la Cámara Alta, el portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, confirmó ayer que este documento no se ha firmado, aunque precisó que de igual manera, el presidente trasladará en el Senado “que cuenta con el respaldo del conjunto de las fuerzas políticas canarias, las instituciones y las ONG más representativas”.

El Gobierno de Canarias informó la pasada semana de que quería intensificar su ofensiva institucional para presionar al Estado y a la Comisión Europea a que resuelvan la situación que se está viviendo en el Archipiélago, donde la llegada de miles de personas de forma irregular a bordo de precarias embarcaciones ha desbordado la capacidad de gestionar esta crisis. A las incidencias protagonizadas por migrantes, se unen los brotes de xenofobia que surgen en algunos puntos, así como la precaria situación en la que se encuentran los que están acogidos en los diferentes campamentos puestos en marcha por el Gobierno nacional y que se encuentran en malas condiciones, ya que además de al frío y la escasez de comida, también han tenido que hacer frente a vertidos de aguas fecales en alguno de ellos.

A pesar de que el Ejecutivo canario no ha logrado alcanzar este acuerdo para exponerlo en Madrid, Ángel Víctor Torres no renuncia a poder firmarlo en las próximas semanas y llevarlo a Bruselas, ya que el Gobierno regional está gestionando que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen reciba al presidente canario en una próxima visita. En ella, Torres quiere trasladarle que Europa debe ser solidaria con territorios como Canarias, que reciben migrantes al ser frontera Sur del continente y además recalcarle que el Archipiélago no tiene capacidad para asumir en solitario la gestión de esta crisis.

Julio Pérez concretó ayer que los servicios de presidencia trabajan ya para darle forma a este documento en el que se plasme de forma expresa y escrita el respaldo de la sociedad canaria a las derivaciones de migrantes. De esta manera, aseguró que “la iniciativa de que se plasme este respaldo en algún tipo de formato documental” sigue vigente.

Aún así, Pérez reiteró que aunque no exista este documento concreto, el presidente canario trasladará en el Senado el rechazo de la sociedad canaria a la que las Islas se conviertan en una cárcel para estas personas.

Ángel Víctor Torres mantendrá hoy reuniones con la presidenta de la Cámara Alta, María Pilar Llop, y con el eurodiputado de Ciudadanos, José Ramón Bauza, antes de comparecer a las 12:30 hora peninsular en el Senado. Allí desarrollará su ponencia sobre la insularidad y la situación periférica de Canarias enmarcada en la Comisión de Despoblación y Reto Demográfico.

Una comparecencia donde describirá la situación de la crisis migratoria que viven las Islas y trasladará que el Archipiélago no puede acabar siendo el último destino para estas miles de personas, que en la mayoría de los casos quieren marcharse de Canarias hacia otros puntos de la Península o de Europa, donde tienen familiares o amigos, pero que se encuentran con la oposición de los agentes de policía en los aeropuertos cuando tratan de embarcar.

Para esta ponencia, el presidente regional también expondrá la situación límite que vive Canarias respecto a la tutela de los niños y adolescentes que han llegado en pateras a las costas de Canarias. En estos momentos, casi 2.700 menores inmigrantes no acompañados están bajo la tutela del Ejecutivo canario, una cifra que supera la capacidad de la Comunidad Autónoma, ya que la norma que atribuye esta competencia está pensada solo para la tutela de niños nacidos en las Islas. Sin embargo, apenas siete comunidades se han ofrecido para compartir la responsabilidad con el Archipiélago, ofreciendo apenas cien plazas para su traslado.

Barracones prefabricados

Las casetas del campamento de Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria, se convertirán en dos meses en barracones prefabricados, en una primera fase de mejora de este Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE), con los que se pretende dotar de estabilidad a este espacio. Pestana aseguró que el campamento de Barranco Seco, “donde no queda nadie” en estos momentos”, precisó, dará un salto “en calidad y en atención” que comenzará a percibirse en abril, cuando se estima que las casetas instaladas en ese espacio y en el que los migrantes pueden permanecer 72 horas para ser filiados y someterse a pruebas PCR, se sustituirán por habitáculos prefabricados. Además, se habilitarán nuevas dependencias en una segunda planta y se abrirán otras instalaciones anexas ahora en desuso