El Consejo de Gobierno aprobó ayer el decreto para activar el plan de transición energética de la Comunidad Autónoma, que sentará las bases para la descarbonización de las Islas en 2040. La iniciativa se encomienda a la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial y busca guiar al Ejecutivo en las medidas necesarias para favorecer el desarrollo sostenible, la transición ecológica y la lucha contra el cambio climático.

Según el Gobierno, el plan de transición energética obedece a la necesidad de descarbonizar la economía canaria, lo que “pasa inevitablemente” por promover y liderar un “cambio profundo” en el actual sector energético de las Islas, caracterizado por su “gran dependencia” del exterior, basado en combustibles fósiles y, por lo tanto, con “impactos negativos” sobre el medio ambiente.

El Ejecutivo resalta que en estos momentos el sector procesado de energía es el que contribuye en mayor medida a las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) alcanzando valores aproximados al 85% de las emisiones GEI totales en Canarias, valor equivalente a unas seis de cada siete toneladas GEI.

Por ello, el Gobierno entiende que el nuevo plan “urge todavía más” debido a que el objetivo de descarbonización para Canarias se quiere alcanzar en 2040, diez años antes que el objetivo de descarbonización fijado a escala nacional.