Decenas de migrantes acogidos en el campamento de Las Raíces, en el municipio de La Laguna, protestaron en la mañana de ayer, una vez más, por las circunstancias en las que viven en dicho recinto. Algunos de los motivos de esas quejas ya eran conocidas: escasa comida, sin agua caliente en los baños, frío por las noches y, sobre todo, que no pueden salir a la Península y otros países para "buscarse la vida". Pero a estas se suman otras, como la falta de atención sanitaria adecuada y de medicación, así como de falta de papel en el baño. Además, en el acto de ayer mostraron su rechazo a vivir en lo que consideran una "prisión" y a sufrir actos de "racismo".

En una de las pancartas desplegadas se podía leer: "somos migrantes, no criminales, libertad", mientras que otra decía: "No al racismo, prisión".

Los migrantes magrebíes lideran las protestas contra la atención y han protagonizado las dos reyertas registradas en las dependencias situadas en el antiguo acuartelamiento militar situado en el Camino del Rodeo Alto.

Respecto a las protestas registradas en la mañana de ayer, la entidad que gestiona el campamento, Accem, manifestó que "trabajamos para que el clima sea lo mejor posible", así como que no haya motivos para altercados.

Fuentes de esta ONG explican que en los últimos días no se han producido derivaciones a la Península ni devoluciones a África de personas acogidas en Las Raíces.

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Protestas de los migrantes de Las Raíces Andrés Gutiérrez

Desde Accem explican que "pensábamos que el asunto de las comidas se había subsanado y habían mejorado las raciones". Respecto al frío que se registra por las noches dentro de las carpas, reconocen que no existe calefacción y que a cada migrante se le entrega un saco de dormir y dos mantas.

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Además, "cuando se detecta una deficiencia se asume desde la normalidad y se notifica", con el objetivo de que se pueda corregir el problema. Cabe recordar que Accem ofrece asistencia humanitaria, social y sanitaria. De hecho, en el proyecto de puesta en marcha de Las Raíces se contemplaba la contratación de enfermeros y médicos para prestar una atención adecuada a los migrantes.

La protesta de los migrantes se produjo horas después de que en el citado recinto se produjera la segunda reyerta que requirió la intervención de policías nacionales y policías locales durante la noche del domingo. En el suceso hubo varias personas heridas, entre ellas varios vigilantes, y un total de cinco migrantes detenidos.