Decenas de migrantes que se han visto envueltos en conflictos con cuidadores o compañeros en los hoteles en los que han sido alojados tras llegar a Gran Canaria en pateras o cayucos malviven en barrancos y zonas abandonadas de San Bartolomé de Tirajana y Mogán, en el Sur de Gran Canaria. Estas personas no están siendo atendidas por el Estado y están bloqueadas en la Isla. Carecen de respaldo sanitario o social alguno por parte de las administraciones, lo que les acerca a situaciones de extrema pobreza y marginalidad.

Además, según denuncia el Ayuntamiento de Mogán, la Delegación del Gobierno no ha establecido aún un protocolo de actuación para ver qué se hace con estos migrantes “más conflictivos”, pese a que la semana pasada el delegado Anselmo Pestana anunciara que serán expulsados“ de manera preferente” quienes delincan o tengan conductas disruptivas. Esta situación contribuye a convertir la crisis migratoria en un problema social para el Archipiélago y está causando aún más tensión entre los vecinos de estos municipios por la situación en la que se encuentran estas personas.

A ello se suma que hay migrantes que se han ido por voluntad propia de los hoteles para poder seguir su tránsito a la Península pero no se les ha permitido volar, y no pueden regresar a los establecimientos si han transcurrido tres días, con lo que estas personas también están en situación de marginalidad viviendo donde pueden. Los ayuntamientos de Mogán y San Bartolomé de Tirajana avisaron ayer a la Delegación del Gobierno de que se están produciendo estos asentamientos en barrancos y en áreas urbanas abandonadas de ambos municipios. El concejal de Seguridad de Mogán, Mencey Navarro, pidió a la subdelegada, Teresa Mayans, que presente el protocolo de actuación para que los policías actúen ante altercados de migrantes y sepan dónde los tienen que trasladar. Mayans se comprometió a entregarlo el viernes de la próxima semana. Navarro se quejó de nuevo de la opacidad de la Delegación del Gobierno que “no ha aportado el número de migrantes acogidos en hoteles de Mogán ni las altas, bajas o traslados”.

La subdelegada se reunió también con el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, es decir, convocó a ambos ayuntamientos por separado pese a que comparten problemas comunes, a la mesa de coordinación de la Junta de Seguridad Local donde estuvo presente Cruz Roja y la directora general de Protección a la Infancia y la Familia, Iratxe Serrano, entre otros asistentes. La alcaldesa de Mogán, Conchi Narváez, manifestó ese nuevo problema añadido de los “asentamientos·” de los migrantes que se quedan en la calle en su municipio. Un vídeo grabado por una vecina en el canódromo de El Veril, cercano a la Comisaría de Maspalomas, muestra cómo malviven.

Cruz Roja cuantificó ayer en 72 personas las expulsadas de los hoteles, a los que se suman una veintena que han abandonado los centros por iniciativa propia. Según el Ayuntamiento de San Bartolomé, los datos de estas personas ya obran en manos de la Policía Nacional, lo cuales en coordinación con la Policía Local procederán en los próximos días a su localización para ingreso en los CIE y posterior expulsión. No obstante, Teresa Mayans destacó que cuentan con un número limitado de repatriaciones que irá creciendo progresivamente. Sobre el desalojo de hoteles, el acuartelamiento Canarias 50 ya está al 100%, con 400 personas trasladadas de hoteles como el Arguineguín Park, en Mogán, que aún alberga a migrantes. Ahora empieza la fase dos para ampliar este cuartel de La Isleta con más carpas para acoger a más migrantes.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, señaló ayer que los incidentes protagonizados por los migrantes en la Isla son casos “aislados” y le preocupa la “xenofobia”que se puede generar. La Policía tiene la “lupa puesta” sobre estos hechos, aseguró.

Llega la Salvamar Macondo

Salvamento Marítimo ha decidido asignar al último barco de rescate que se incorpora a su flota, la Salvamar Macondo, al puerto de Arguineguín, en el sur de Gran Canaria, donde sustituirá a la Salvamar Menkalinan, que acumula cientos de pateras y cayucos rescatados en los últimos meses. La llegada al sur de Gran Canaria de la más moderna de las ‘salvamares’ forma parte de un triple movimiento: la Menkalinan pasará a prestar servicio en Playa San Juan, en Tenerife, y desde allí, la Salvamar Alborán se trasladará a La Gomera. La Salvamar Macondo ha sido construida en los astilleros de Auxiliar Naval del Principado de Asturias, ha supuesto una inversión de 2,1 millones de euros y acaba de ser entregada a Salvamento. Los barcos tipo Salvamar alcanzan velocidades superiores a 65 Km/hora.