El Ministerio del Interior asevera que existe un control exhaustivo sobre los migrantes que llegan a las costas de Canarias en embarcaciones. Los trabajos de filiación policial que se hacen tras cualquier llegada irregular garantizan un control sobre todas las personas que llegan en pateras y cayucos, afirma Interior.
En este proceso se incluyen labores de información y el volcado de datos con las huellas dactilares en bases nacionales e internacionales. Además, la relación de los servicios de información con las autoridades policiales de países terceros permiten afianzar la seguridad de los ciudadanos, “como lo demuestran las operaciones antiterroristas que se han llevado a cabo en los últimos meses”, exponen desde el Ministerio.
Aunque “no hay riesgo cero”, precisan, a día de hoy Interior considera que la labor policial supone un filtro fiable de las personas que llegan y el hecho de que sean islas propicia un control más fácil sobre las migrantes que arriban de forma irregular.
Por tanto, el Ministerio del Interior pone en entredicho que haya una relación real entre las pateras y el posible camuflaje de yihadistas a bordo, pese a que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) haya puesto sobre la mesa desde el pasado noviembre la posibilidad de que el terrorismo yihadista tratara de utilizar las vías de acceso ilegal a Europa gestionadas por las mafias para entrar en el continente y, entre ellas, alertara especialmente sobre la ruta canaria.
El CNI pasó esta alerta a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, según publica el periódico El Mundo. Interior desconoce este informe y subraya que -al menos en Canarias- existe un control absoluto sobre los migrantes que llegan a los que se les hace la filiación policial y las pruebas Covid en las primeras 72 horas. No obstante, desde el Ministerio insisten en que “no hay riesgo cero”.
La operación que culminó con la detención de tres personas el pasado viernes en Barcelona demostró que, al menos, dos de ellas llegaron a España en patera procedentes del norte de África. Eran dos ciudadanos libios y un marroquí, que habían ido a la Ciudad Condal con intención de preparar atentados y a los que se les atribuye un delito de integración en organización terrorista. Llegaron en patera -por la provincia de Almería- procedentes de Argelia y atravesaron el país en coche hasta Barcelona.
El CNI alertó sobre la llegada de yihadistas en noviembre en grupos o de forma individual en las pateras y puso el foco en la ruta migratoria del Atlántico, que ha tenido un importante repunte frente a la del Mediterráneo, sobre la que ha descendido el control que se ha realizado.
Un total de 41.861 inmigrantes en situación irregular llegaron a España por vía terrestre y marítima entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2020, un 29% más que el año anterior, y se debe sobre todo a las llegadas a Canarias, donde en 2020 arribaron 23.023 migrantes, un 756,8% más que en el año 2019.
Mientras, a la Península y a Baleares llegaron 1.282 pateras con 16.610 personas a bordo, lo que supone una reducción en el número de inmigrantes de un 24% y confirma el auge de la ruta del atlántico, la que lleva directamente a Canarias, frente a la vía del Mediterráneo.
La llegada de pateras ha bajado en estos dos días en Canarias pero en lo que va de año, en 2021, han arribado a las costas isleñas en torno a 850 personas y han fallecido seis migrantes.
