Román Rodríguez se reunió ayer en privado con el coordinador de Ciudadanos en las Islas, Enrique Arriaga, para recabar el apoyo de Cs al Gobierno presidido por el socialista Ángel Víctor Torres. El vicepresidente autonómico y líder de Nueva Canarias (NC) trata de convencer a Cs, que cuenta con dos diputados en el Parlamento, para desactivar una posible moción de censura. No en vano, el abandono del grupo parlamentario de NC de la diputada Sandra Domínguez -pieza clave para la moción de censura contra el socialista Blas Acosta en el Cabildo de Fuerteventura- dejaría al cuatripartito con 36 escaños en el Parlamento de Canarias, solo uno por encima de la mayoría absoluta.

Ante esta fragilidad, los tres diputados de la Agrupación Socialista Gomera de Casimiro Curbelo disponen de nuevos argumentos para dar la mayoría a un cuatripartito alternativo: CC, PP, Cs y la propia ASG.

Conocida la sintonía entre Curbelo y el líder de CC, Fernando Clavijo, Román Rodríguez se ha puesto manos a la obra para ganarse el apoyo de Cs y taponar la grieta en su propio grupo parlamentario: el de NC.

Rodríguez y Arriaga se citaron ayer en el restaurante La Gioconda de Las Palmas de Gran Canaria, adonde el coordinador de Cs se desplazó a propósito desde Tenerife. En el almuerzo también estuvieron Carmelo Ramírez, secretario de Organización de NC y consejero del Cabildo de Gran Canaria, y Ruymán Santana, coordinador de los cargos públicos de Cs y consejero -en la oposición- del Cabildo. Los cuatro ocuparon un lugar discreto, una mesa alejada, en el restaurante.

La idea en NC es neutralizar la alianza de CC y PP y garantizar que la censura en Fuerteventura no acabe por desestabilizar el Gobierno de Torres, con una alternativa con Curbelo como candidato a presidente.

Sandra Domínguez es parlamentaria en el grupo de NC por Fuerteventura, aunque milita en Asambleas Municipales de Fuerteventura (AMF), una de las organizaciones aliadas con las que los de Román Rodríguez han intentado ganar presencia fuera de Gran Canaria.

NC pactó con AMF en las elecciones autonómicas y municipales de 2019, pero el pacto se tambalea, y con este se tambalea también la obediencia de Sandra Domínguez a las directrices de NC. Blas Acosta preside el Cabildo de Fuerteventura por el acuerdo entre PSOE y NC secundado en su día por Podemos, AMF y Unidos por Betancuria.

Un acuerdo a estas alturas muy deteriorado que ha desembocado en la renuncia de Marcelino Cerdeña a su acta de consejero para propiciar la moción de censura. A Cerdeña lo sustituirá precisamente Sandra Domínguez, desenchufada ya de la disciplina de NC y desobediente ante las órdenes de Román Rodríguez. Con la fuga de uno de sus diputados, Sandra Domínguez, el grupo parlamentario de NC pierde poder e influencia para seguir como pegamento del pacto en el Cabildo de Fuerteventura.

Si Ángel Víctor Torres es ahora presidente de Canarias es porque Curbelo se decidió in extremis a apoyar al socialista tras esperar sin éxito a que cuajara durante un mes un cuatripartito con Cs, PP y la CC de su “amigo” Clavijo.

Ahora, con la eventual salida de Sandra Domínguez de la bancada de NC rumbo el grupo mixto -la presidenta de AMF puede compatibilizar los cargos de diputada y de consejera del Cabildo majorero-, la mayoría del Ejecutivo mengua. Se queda en 36 diputados. Un solo voto por encima de la mayoría. A partir de ahí, los nervios.

Ya no son necesarios los dos votos de Cs para lograr una mayoría alternativa al actual Gobierno. Basta con uno de los dos diputados de Ciudadanos y el voto de Sandra Domínguez para que triunfe una moción de censura. La manta que cubre el actual Gobierno se acorta. Sobre todo porque Ciudadanos es un sudoku.

Sin garantías de lealtad y disciplina, sin mando y jerarquía, ante un partido errante como el de Ciudadanos Román Rodríguez hace lo que puede. Habla con, en teoría, el líder del partido, Enrique Arriaga, pero el coordinador fue incapaz de parar la moción de censura contra la alcaldesa de Santa Cruz, Patricia Hernández, y se reúne con el portavoz en Gran Canaria, Ruymán Pérez, quien desde la oposición fustiga al presidente de NC del Cabildo.

¿Qué puede ofrecer Román Rodríguez a Cs? Cargos intermedios, puestos en la Administración, hasta la entrada en el Gobierno del Cabildo de Gran Canaria. Favores institucionales y fondos públicos. Y una puerta abierta para la vuelta de la tinerfeña Melisa Rodríguez, exportavoz adjunta de Cs en el Congreso. En la dirección nacional de Ciudadanos impulsarían el regreso de Melisa Rodríguez a las Islas con un cargo vinculado al Gobierno.