Canarias está negociando con otras comunidades autónomas el traslado de menores migrantes a sus territorios. Las conversaciones se están llevando a cabo de forma bilateral, es decir, entre el Gobierno de Ángel Víctor Torres y los Ejecutivos de las regiones dispuestas a hacerse cargo de estos chicos (en su gran mayoría son varones). El propio presidente autonómico adelantó ayer en el Parlamento que las negociaciones están muy avanzadas, si bien el traslado de menores implica el traspaso de su tutela a la comunidad de acogida, lo que a su vez conlleva un trámite administrativo que impide que las derivaciones sean inmediatas. El Gobierno de Canarias también intenta acelerar las derivaciones de migrantes mayores de edad, pero en este caso no basta con acuerdos bilaterales entre regiones, sino que es necesaria la intervención del Estado. Las autonomías tienen la competencia en la acogida de menores, los llamados Mena —por el acrónimo de menores extranjeros no acompañados—, lo que facilita un diálogo directo entre Ejecutivos que no es posible en el caso de los adultos, ya que la competencia es estatal.

Torres corroboró ante el pleno del Parlamento que el Estado finalmente sí está trasladando a la Península a parte de los migrantes que en las últimas semanas han llegado al Archipiélago en pateras o cayucos. Prueba de ello, apuntó el presidente del Gabinete autonómico, es que ya está habiendo quejas de los dirigentes de algunas de las regiones adonde han sido derivados. De hecho, el socialista aprovechó una pregunta sobre fiscalidad de la presidenta del PP en las Islas, María Australia Navarro, para pedirle que “llame a sus compañeros de partido, que se quejan de los migrantes llegados desde Canarias”.

En respuesta a una interpelación del diputado de Coalición Canaria (CC) Pablo Rodríguez, Torres adelantó que están ultimándose esos acuerdos con otras comunidades autónomas para la acogida de migrantes, tanto adultos como menores de edad. Con la necesaria participación del Estado en el caso de los primeros y de forma bilateral en el caso de los Mena, que son un total de 2.149 en la actualidad. En todo caso, el también secretario general del PSOE canario hizo hincapié en que los traslados se están produciendo y en que continuarán en las próximas semanas.

Coalición reduce a un 1% el número de inmigrantes derivados a la Península

No obstante, y pese a la insistencia del presidente, el parlamentario de CC puso en duda las “supuestas” derivaciones de migrantes a otros puntos del país y señaló que, en tal caso, el número es tan insignificante que no puede hablarse de derivaciones en sentido estricto. “¿Un 1%?”, se preguntó Rodríguez de forma retórica. “¿En eso se traduce la solidaridad anunciada por Pedro Sánchez?”, continuó el diputado.

Aunque Ángel Víctor Torres elevó el tono al recordar que él mismo ha sido “categórico y rotundo” en la exigencia de que los migrantes se distribuyan entre todos los Estados Miembros —incluida España—, el secretario general de CC en Gran Canaria le reprochó que se haya movido “entre la justificación y el conformismo”. “Justificando a los ministros y a sus superiores en el PSOE y conformándose con que las supuestas derivaciones sean de un 1% de los migrantes o con que cuatro meses después se cierre el campamento de la vergüenza de Arguineguín para trasladar a los inmigrantes a otro campamento de la vergüenza a ocho kilómetros de distancia”, le espetó Rodríguez al presidente. Fue entonces cuando la discusión giró hacia un abierto enfrentamiento entre ambos, entre CC y el PSOE, por cómo uno y otro afrontaron las crisis de los cayucos, la de 2006-2007 los nacionalistas y la actual los socialistas.

En 2006, rememoró el dirigente autonómico, “llegó a haber 16.000 personas hacinadas en la terminal de Fuerteventura”, una frase que encendió los ánimos del parlamentario de CC y del resto de la bancada nacionalista.

Torres recordó que entonces, en aquella primera crisis de los cayucos, también tuvieron que habilitarse instalaciones militares como alojamiento —allí hubo quienes llegaron a pasar más de dos años de su vida— y también fueron necesarios “meses” para tomar las medidas oportunas. “La amnesia se convierte a veces en herramienta política”, contraatacó el socialista, a quien desde la bancada de enfrente, la del grupo parlamentario nacionalista, José Miguel Barragán le negaba con el dedo: “¡Estaban mejor, estaban mejor!”, le repitió el diputado de CC en relación con el trato dispensado entonces a los migrantes en contraposición con las imágenes que ha dejado el campamento de Arguineguín.

Ya al margen de la refriega con CC, y en respuesta a una pregunta de la diputada de Ciudadanos Vidina Espino, Torres avanzó que la Justicia ha avalado la orden de la Consejería de Sanidad que obliga a los inmigrantes que den positivo por coronavirus a cumplir el período de cuarentena de diez o 14 días.