Su discurso se alejó de las críticas de vertidas por otros alcaldes a la hora de denunciar "el retraso acumulado" a la hora de liberar el superávit para centrarse en los objetivos sociales que se pueden acometer una vez se han suspendido las reglas de gasto para lo que queda de 2020 y el próximo año. "Eso nos va a dar un respiro", subraya Luis Yeray Gutiérrez, alcalde de La Laguna, en referencia a un debate que se ha alargado durante meses. "Nosotros no teníamos superávit porque la situación económica de los últimos años no lo posibilitó, pero sí un remanente", señala sin olvidar que en la segunda quincena del mes de marzo las áreas de Hacienda y Asuntos Sociales remitieron un informe a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en la que se especificaban 27 puntos útiles a la hora de contribuir a una mejor gestión de las entidades locales en base a los efectos colaterales derivados de la crisis sanitaria.

Una decisión esperada

Gutiérrez sí que coincidió con José Manuel Bermúdez, alcalde de Santa Cruz de Tenerife, y con Augusto Hidalgo y Héctor Suárez, primeros ediles de los municipios de Las Palmas de Gran Canaria y Tele, a la hora de comenzar a canalizar las líneas de actuación a seguir en las próximas semanas. "Tenemos mucho trabajo por delante, pero las circunstancias han cambiado: "desde el principio defendimos que había que ser flexible con la regla de gasto de las entidades locales que contaban con un superávit, con independencia de que cumplan o no con los requisitos establecidos por la Disposición Adicional Sexta de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera".

El socialista, que no escondió la larga lista de necesidades de perfil social que hay que atender en La Laguna, incide en el hecho de que "ya en ese momento -en el documento remitido a la FEMP el 24 de marzo- solicitamos que ese superávit pudiese destinarse a cualquier tipo de actuación, ya sea de gasto corriente o de inversión, y además de los gastos extraordinarios de servicios sociales, seguridad ciudadana, limpieza y desinfección de espacios afectados por la pandemia", enumera el dirigente socialista.

Lo que no tiene claro en estos momentos el alcalde lagunero es por dónde van a empezar. "Tenemos que hacer una revisión de lo sucedido y, sobre todo, de lo que podría suceder si se cumplen las peores previsiones que hablan de un empeoramiento de la situación en el mes de noviembre. En este sentido, la prioridad en estos momentos continúa sigue siendo la acción social en aquellos núcleos en los que se han detectado situaciones de emergencia".

"Decidir con serenidad"

El "respiro" financiero del que habla Gutiérrez es una consecuencia directa de la decisión de "eliminar la regla de gasto para 2021, ya que en este ejercicio es francamente difícil poder ejecutar el 100% del superávit que se libere a partir de la aplicación de esta medida".

El alcalde de La Laguna ha repetido en varias ocasiones, incluso en el periodo en el que aún estaba activo el estado de alarma, que los ayuntamientos son las primeras puertas que tocan los ciudadanos cuando hay dificultades. En este sentido, asegura que hay que estas instituciones son las que mejor conocen una realidad que cada día es más complicada... No sabemos cómo vamos a estar en un mes; hay que atender a los que tienen más dificultades", reitera en base al aluvión de peticiones recepcionadas y tramitadas en las distintas áreas municipales, especialmente, las que tienen un vínculo más estrecho con los asuntos sociales. "Hay que tomar decisiones sin perder la serenidad", dice.