El consejero canario de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad, Julio Pérez, desvinculó ayer el aumento del flujo migratorio a Canarias desde las costas noroccidentales del continente africano de la polémica entre Marruecos y España por la delimitación de las aguas territoriales en la zona del Archipiélago.
La posibilidad de que Marruecos favoreciera la salida de pateras por la oposición de España a sus recientes leyes en las que extiende unilateralmente su jurisdicción a las aguas saharauis fue mencionada por el diputado regional de Coalición Canaria-Partido Nacionalista Canario (CC-PNC) Juan Manuel García Ramos. El nacionalista preguntó por el control de las aguas marítimas al consejero en el Parlamento regional.
El consejero había acudido a la comisión también para informar sobre los recursos de seguridad para atender la crisis migratoria actual por iniciativa del Partido Popular (PP), pero no pudo hacerlo porque la petición de comparecencia fue aplazada.
Respecto a las aguas marítimas, Julio Pérez indicó que está pendiente de un debate jurídico y político el desarrollo del artículo 4 del Estatuto de Autonomía, que define las aguas canarias como las que quedan dentro del perímetro del Archipiélago, si bien no hay alteración de las competencias sobre las mismas y en parte son aguas internacionales.
En cuanto a la ampliación que Marruecos pretende de sus aguas, el consejero autonómico de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad afirmó que la ley marroquí aprobada al respecto no tiene ninguna traducción práctica, porque en derecho internacional "nadie se hace dueño de nada porque lo diga él", de manera unilateral.
Por tanto, mientras esa pretensión marroquí no se tramite ante alguna instancia internacional, ni siquiera España tiene que impugnar nada de lo aprobado por las autoridades marroquíes, que es solo "una pretensión sin consecuencias prácticas" que choca con pretensiones españolas anteriores.
En opinión del consejero, Marruecos "jamás ganará esa batalla" de pretender extender sus aguas territoriales.
Julio Pérez consideró que esta pretensión del gobierno marroquí no tiene relación con el aumento de la llegada de pateras. En esa línea, apuntó que el principal motivo del repunte del fenómeno migratorio de magrebíes y subsaharianos hacia Canarias tiene que ver con las guerras y las necesidades vitales de las personas.
Además, el consejero señaló que aunque algunas pateras salen de El Aiún, en territorio del Sahara Occidental, ocupado por Marruecos desde hace 45 años, la mayoría de las embarcaciones parten de la costa de Mauritania, de ahí el viaje esta mima semana a ese país del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en compañía de la comisaria europa de Interior Ylva Johansson.
García Ramos denunció el interés de Marruecos por anexionarse aguas marítimas al establecer las doce millas náuticas de aguas territoriales, las 200 de zona económica exclusiva y las 350 de plataforma continental desde la costas del Sahara Occidental.
