El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha expresado este lunes su "profundo malestar" por la anulación del viaje del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, que tenía previsto visitar las islas el miércoles para analizar de primera mano el crecimiento en la llegada de pateras.

En declaraciones a los periodistas ha apuntado que ha habido "dificultades" en la agenda del ministro y probablemente "razones poderosas" para no viajar pero no ha ocultado su decepción porque la situación actual de la migración en las islas precisa de una "respuesta adecuada".

Por ello, el presidente ha contactado con la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, para que se activen los "mecanismos entre ministerios" que permiten resolver los problemas en la vigilancia de las costas, el acogimiento y la repatriación o el tránsito hacia otros lugares.

Torres ha incidido en que el crecimiento de la migración irregular no es un fenómeno nuevo en Canarias pero ha pedido "no hacer política" con un "drama humano".

El presidente ha admitido que la "responsabilidad máxima" es del Estado pero ha resaltado el "esfuerzo ímprobo" de las administraciones canarias pues más del 90% de los espacios ocupados son cedidos por instituciones locales, de ahí que inste al Gobierno central a habilitar instalaciones militares y los CIE transformados.

En esa línea, ha señalado que los hoteles son instalaciones alojativas y no deben albergar a migrantes pero no obvia que se viven "circunstancias sobrevenidas y excepcionales" -en pandemia se alojó a sanitarios, por ejemplo- de ahí que se necesite una "respuesta integral".