El Círculo Turístico de Canarias ha exigido este miércoles que se endurezcan las medidas de contención del coronavirus en las islas con refuerzos adicionales, si hace falta de la Unidad Militar de Emergencias, y ha pedido que se prohíban bodas, bautizos y otros eventos sociales.

En un comunicado el Círculo Turístico de Canarias (CTC) advierte de que el sector del turismo en las islas "está en la UCI" y solicita la unión de todas las fuerzas políticas y empresariales, así como colectivos sociales, en apoyo "sin fisuras" al Gobierno de Canarias para salvar esta actividad económica.

"Son muchos meses reivindicando que se exijan pruebas PCR en origen para dar la máxima seguridad a los turistas, a nuestros trabajadores y a la sociedad en su conjunto, sin respuesta efectiva por parte del Gobierno estatal", avisa.

Es más, Canarias fue pionera en solicitarlo y aún habiéndose implementado esta exigencia en otros países, se sigue sin dar un paso al frente y mientras tanto, prosigue el Círculo, el turismo no sólo ha ido a menos sino que está arrastrando otros subsectores como el comercio, la restauración, el inmobiliario y el ocio.

"Estamos abocados a una ruina económica y social por una dejadez asombrosa e inaceptable del Gobierno central, con 317.000 personas actualmente en el paro o en el ERTE y sin expectativa de una temporada de invierno a la vuelta de la esquina, el turismo se encuentra en la UCI y es necesario tomar urgentemente medidas", subraya.

El CTC propone que se exijan pruebas PCR a todos los turistas en origen con un máximo de 72 horas antes de iniciar el viaje y que el coste sea asumido por los viajeros o operadores turísticos.

El coste es mínimo y lo cubren los propios seguros médicos de los países emisores y en caso contrario, para un viajero es perfectamente asumible, prosigue el CTC, que asegura que "si nuestros competidores en la temporada de invierno como Egipto pueden, nosotros también".

En cuanto al archipiélago, indica que las cifras de contagio no paran de subir y "es absolutamente necesario tomar más medidas, antes que se cierren las islas a los pocos países emisores que aún operan".

Para ello, propone reforzar el control de fiestas y botellones privados, prohibición de bodas, bautizos y eventos, control sobre el aforo y las medidas preventivas en las excursiones turísticas, en especial las embarcaciones de gran capacidad, cierre temporal de polideportivos y parques, control de aforo en las playas y patrullas permanentes que controlen en los lugares de gran afluencia el cumplimiento de las normas.