Desesperación, incertidumbre y agonía. Una trilogía que tiene atrapados desde hace dos años y medio a los trabajadores del hotel Oliva Beach y a sus familias, ante la falta de respuesta del Ministerio de Transición Ecológica por la licencia para rehabilitar las citadas instalaciones hoteleras. Este 'olvido' posibilita que mañana los trabajadores y representantes sindicales se concentren una vez más ante la sede de la Presidencia del Gobierno de Canarias para reclamar de nuevo la intervención del presidente canario Ángel Víctor Torres y continuar visualizando el problema que afecta a unas 400 familias majoreras. Además, no descartan acampar ante el edificio gubernamental.

Es la segunda ocasión en que los trabajadores de este hotel majorero llevan sus protestas a la capital grancanaria. La primera fue el 30 de octubre de 2019 cuando se concentraron ante la Delegación del Gobierno. Posteriormente traspasaron las fronteras canarias y el 5 de noviembre de 2019 se trasladaron hasta Madrid para elevar su agravio ante el edificio del Ministerio de Transición Ecológica. El 17 de febrero pasado hicieron lo propio ante el Parlamento de Canarias y tras protestar en la calle fueron recibidos por el presidente Torres.

"Una vez más nos vemos obligados a salir a la calle, una vez más nos vemos pidiendo ser escuchados, una vez más nos sentimos olvidados por este gobierno. Son ya dos años y medio de incertidumbre, de preguntas sin respuesta, de evasivas por parte de todos", señalan los representantes de los trabajadores.

Además, según recogen en un escrito que leerán durante la jornada de protesta, se muestran críticos con la pasividad de los responsables de distintas instituciones que tienen que ver con la aprobación de la licencia de reformas, desde el Ministerio de Transición Ecológica, "un ministerio con una Ministra ausente, doña Teresa Ribera que no da la cara ni se digna contactar con nosotros, con un Secretario de Estado, el señor Hugo Morán, carente de empatía con los trabajadores, sufrimos su incomprensión y su falta de objetividad, nos ha recibido sí, pero para decirnos que no pasa nada, que Canarias podría vivir sin turismo, como lo ha hecho Asturias,su tierra natal, sin la minería; lo que expresa un desconocimiento de nuestras Islas y realidad; y con una Directora general, la señora Ana Oñoro, incapaz de comprender la situación que viven los trabajadores y sus familias".