Más de un mes después de firmarse el pacto para la reactivación económica y social de Canarias, el Gobierno regional se compromete a presentar el próximo 13 de julio a las organizaciones firmantes el primer borrador del plan que lo desarrolla y después constituir las mesas de trabajo sectoriales. A día de hoy el pacto sigue pendiente de dos elementos clave: el Estado y la Unión Europea (UE). Ni uno ni otro han concretado todavía las medidas y la financiación que demanda Canarias para no verse sumergida en una recesión económica peor que la de 2008. El cuatripartito apura los plazos pero admite que la primera versión del plan de reactivación que ultima no tiene presupuesto y que la incertidumbre que genera Bruselas deja muchas cuestiones en el aire.

El cierre el pasado viernes de la comisión del Congreso de los Diputados constituida para elaborar el plan de rescate económico estatal ha sido un jarro de agua fría para las expectativas canarias. Los dos grupos nacionalistas de las Islas -Coalición Canaria y Nueva Canarias- han expresado su descontento, algo que resulta sintomático cuando se da el caso de que NC forma parte del pacto de gobierno que sustenta el Ejecutivo regional. "No avanzamos en la dirección adecuada", asegura taxativo el diputado Pedro Quevedo porque las singularidades canarias no quedan bien atadas en el documento final del Congreso, lo que deja la puerta abierta a la incertidumbre, algo incompatible con la recuperación económica.

El viceconsejero de Presidencia del Ejecutivo regional, Antonio Olivera, reconoce que el plan no podrá ser un documento cerrado y con una ficha financiera concreta porque aún se desconoce la cuantía de los recursos que vendrán del Estado y de la UE. "El plan será un punto de partida, habrá un proceso de actualización y seguimiento dinámico para que el plan se vaya actualizando a medida que lleguen nuevos fondos, con el fin de desarrollar las medidas que están previstas", explica Olivera, encargado de coordinar el plan de reactivación. Por ello "en esta primera versión no tiene presupuesto", añade.

Y es que el Ejecutivo se dio especial prisa en firmar el pacto por la reactivación económica y social para realizarlo el Día de Canarias y presumir de ser la primera comunidad autónoma en contar con un documento de este tipo. Pero las dificultades desde el minuto uno han jalonado la concreción del plan de trabajo que debía estar antes de acabar junio para consensuarlo con las organizaciones firmantes y después llevarlo al Parlamento. Empezando por problemas de agenda y carga de trabajo -Olivera ha estado compaginando la Viceconsejería de Presidencia con la Dirección del Servicio Canario de Salud hasta el pasado viernes- y siguiendo por la falta de compromisos concretos del Estado y la lentitud de Bruselas para aprobar los fondos destinados a luchar contra la crisis, el hecho es que será en este mes cuando el Ejecutivo tendrá definidas sus actuaciones y después los partidos, organizaciones y colectivos que respaldaron el pacto podrán aportar sus propuestas.

Este escenario no gusta nada a Coalición Canaria, el principal partido de la oposición, que se sumó al acuerdo con reticencias pero que ahora se siente "decepcionado" por la "indolencia e incapacidad" del cuatripartito, según señala el secretario general de la formación nacionalista, José Miguel Barragán. El también portavoz de CC en el Parlamento se queja de que en el tiempo transcurrido desde la firma hasta ahora "no se haya puesto nada sobre la mesa". A los nacionalistas les preocupa la dinamización de la economía con incentivos y planes propios por parte del Gobierno regional, la preparación de la sanidad pública de las Islas ante la posibilidad de nuevos rebrotes a la vuelta del verano o las incógnitas que aún siguen en torno al inicio del curso escolar.

"Ya hemos perdido un mes y ahora tenemos que trabajar todo el verano porque en septiembre tiene que estar preparado el curso escolar, pero también la sanidad, la economía, la temporada turística... Son muchas cosas y no vemos buenas señales desde el Gobierno", advierte Barragán.

Olivera matiza que, pese a no tenerse aún el plan y la falta de concreción desde las administraciones superiores, el Ejecutivo no se ha parado en este tiempo y se avanza con decisiones que también forman parte de la hoja de ruta marcada en el pacto de reactivación, como es el caso del ingreso canario de emergencia o las ayudas al alquiler. "No estamos parados, hay asuntos en los que se sigue trabajando. En la primera versión del plan no partimos de cero sino que las cosas que estaban claras han seguido adelante y no se está esperando por el plan para desarrollarlas, sino que se sigue trabajando en todos los frentes".