La Federación Canaria de Municipios (Fecam) dio el lunes la voz de alarma ante el presidente del Gobierno autonómico, Ángel Víctor Torres: la pérdida de ingresos conduce a la asfixia inmediata a varias de las localidades del Archipiélago que tienen menos de 5.000 habitantes. No habían pasado ni 24 horas cuando el vicepresidente regional y consejero de Hacienda, Román Rodríguez, les hizo llegar el tranquilizador mensaje de que en julio se les adelantará el pago de 103 millones de euros correspondientes al Fondo de Financiación Municipal.

"Algunos ayuntamientos estaban con la soga al cuello", confirmó al término de la reunión de ayer el vicepresidente segundo de la Fecam y presidente de la Comisión de Economía, Óscar Hernández. Román Rodríguez explicó a una delegación del órgano supramunicipal encabezada por su presidenta, Mari Brito, que el séptimo mes del año será bueno -dentro del desastre generado por el coronavirus- para las arcas de las Islas. Llegarán en torno a 400 millones de euros correspondientes a la liquidación del sistema de financiación autonómica de 2018.

Las transferencias del Fondo de Financiación Municipal se dividen en dos partes, un 35% en abril y el resto en diciembre hasta alcanzar un total de alrededor de 300 millones de euros. Así lo marca la ley, por lo que será necesario articular un cambio legal que lo haga posible. "No creo que nadie se oponga, porque consiste en facilitar la financiación de las administraciones locales", aventuró el consejero de Hacienda.

No será la única variación en la norma que se necesite introducir. La redacción actual obliga a los ayuntamientos a destinar a inversiones la mitad del dinero que les llega desde este fondo. Otro artículo que se variará con el objeto de que reserven cada euro al propio funcionamiento de la institución y a la atención de las muchas necesidades que la pandemia global ha generado a las familias de las Islas.

No obstante, el vicepresidente del Gobierno de Canarias advirtió de que el adelanto de los 103 millones de euros no se convierte en la solución definitiva para los municipios del Archipiélago. En ese contexto se refirió a la reunión bilateral ya aceptada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, con las administraciones locales de las Islas.

"Los 570 millones de euros que pierden", cuantificó Román Rodríguez, 593 millones según los cálculos de cabildos y ayuntamientos canarios, "no son comparables a otro lugar de España". Del bloque de financiación canario dependen más del 40% de sus ingresos y la recaudación por IGIC, AIEM y matriculaciones se hunde hasta el sótano en las actuales circunstancias.

"Es una caída brutal que deja nuestras cuentas muy mermadas", explicó Óscar Hernández. Y los ayuntamiento contarán con la ayuda del Gobierno de Canarias -"si nos invitan, les acompañaremos", ofreció Rodríguez- en la pelea por limar esa pérdida de ingresos. Entre otras cuestiones, pondrán sobre la mesa la utilización de los remanentes de tesorería con los que cuentan y que la ley de estabilidad presupuestaria les ha impedido utilizar hasta la fecha.

"Después de diez años hemos abierto por fin una brecha en esa norma", expuso el vicepresidente del Gobierno autonómico, para quien resultaría "difícil" de entender que Madrid no autorice la utilización de ese dinero que los ayuntamientos tienen en los bancos cuando ya ha consentido que las comunidades autónomas que lucen superávit en sus cuentas, como Canarias, lo utilicen.

En todo caso, tanto el Ejecutivo canario como la Fecam resaltan que estas son soluciones parciales y que la estructural vendrá dada por los fondos que emanen de Europa y el endeudamiento.