Canarias avanzará en la nueva normalidad, la etapa posterior a los más de tres meses de estado de alarma por la epidemia de Covid-19, de forma "gradual y prudente", "recorriendo un camino de mayor a menor restricción". La intención del Gobierno regional era aprobar ayer el decreto que regulará este nuevo periodo en el que entra la Comunidad Autónoma una vez superado el mayor impacto de la pandemia, pero la complejidad y el volumen de la normativa obligó al Ejecutivo a prolongar su reunión semanal hasta la mañana de hoy, cuando previsiblemente se dará luz verde al texto, explicó el consejero de Administraciones Públicas y también de Sanidad -cargo que ocupa transitoriamente-, Julio Pérez, quien ejerce como portavoz del gabinete presidido por Ángel Víctor Torres.

Pérez se mostró extremadamente prudente a la hora de detallar los contenidos de la norma, que reglamentará multitud de aspectos, desde los aforos de todo tipo de establecimientos y actos hasta las condiciones en que se desarrollará el ocio nocturno, el deporte, el acceso a las playas y piscinas o la asistencia a bodas y velatorios. El objetivo del Gobierno, dijo, es "llegar a un compromiso entre las necesidades de defensa de la salud y las de la recuperación económica". "Buscamos un punto de equilibrio", afirmó el portavoz, que advirtió de que "el deseo de recuperar la normalidad y la actividad económica" no puede provocar retrocesos en los avances cosechados por el Archipiélago en el control de la enfermedad.

Menos fiestas

Sí aclaró Julio Pérez que las normas que ultima Canarias serán "un poco más abiertas" que las que ha aprobado Galicia, donde la transición desde la tercera fase de la desescalada hacia la nueva normalidad no presenta cambios apreciables respecto a la etapa anterior. Sin embargo, el consejero reconoció que en algunos aspectos se mantendrán "criterios prudentes" y "ciertas restricciones". Este es el caso, añadió, de las fiestas populares. "Este verano vamos a tener menos que de costumbre", dijo, en la línea de las decisiones que han tomado ya muchos ayuntamientos.

Pero estas limitaciones serán compatibles con la necesidad de "fomentar el turismo interior" -objeto de una campaña promocional puesta en marcha hace unos días por el Gobierno-, lo que "requerirá alguna posibilidad de hacer uso de instalaciones como playas o piscinas de hoteles". Será, sostuvo, "un termino medio".

Canarias entrará el domingo, desde las 00:00 horas, en la nueva normalidad, al igual que la mayor parte del país, aunque algunas comunidades autónomas han optado por adelantarse a esta fecha. Así, Galicia ya ha pasado a esta fase -desde el pasado lunes-, si bien con muchas restricciones, mientras que Cataluña lo hará hoy. Las normas que regirán esta etapa en las Islas centraron la mayor parte del debate de la sesión del Consejo de Gobierno de ayer, puesto que hubo que abordar "punto por punto" las propuestas formuladas por cada una de las consejerías al borrador de decreto.

Lo que no formó parte de las deliberaciones de los consejeros fueron los nombres de las personas que sustituirán a José Antonio Valbuena al frente de Educación, Universidades, Cultura y Deporte -cargo que también ocupa transitoriamente- y al propio Julio Pérez en Sanidad. Este último precisó que las competencias para nombrar y destituir a los titulares de los departamentos corresponden al jefe del Ejecutivo, y no al Consejo de Gobierno. "Pensé que el de hoy [por ayer] iba a ser mi último Consejo como consejero de Sanidad. Espero que sea mañana [por hoy], aunque depende del presidente", reconoció el portavoz del Gobierno.

Entre las competencias que ostenta de forma ordinaria Pérez figura la organización de la función pública y de los procedimientos selectivos de nuevo personal, un aspecto que también resultó afectado por la declaración del estado de alarma. El Gobierno reanudó hace dos semanas la mayoría de los procesos dirigidos a renovar las plantillas públicas, pero mantiene la paralización de los que reúnen un mayor número de aspirantes -sobre todo los de administrativos y auxiliares administrativos de la Comunidad Autónoma- por motivos sanitarios.

Recuperar el tiempo

En este sentido, el consejero expresó ayer su voluntad de "pisar el acelerador para recuperar el tiempo perdido", lo que incluye no solo culminar estas ofertas públicas de empleo sino también desarrollar la del área sanitaria. "Reclutar más efectivos y dar mayor estabilidad a los que ya tenemos son objetivos prioritarios", aseguró Julio Pérez, quien recordó que, al margen de los condicionantes impuestos por la Covid-19, su departamento tuvo que levantar la suspensión que había decretado el gobierno anterior sobre algunos procedimientos. Esta tarea debe acometerse, precisó, "con respeto a la ley, a las garantías, a los derechos de los participantes en procesos selectivos y a los de los trabajadores inestables de la administración, pero -insistió- pisando el acelerador".