El portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha reconocido este jueves que la respuesta que se da a los migrantes que están llegando a las islas por mar, y en pleno repunte en los últimos meses, es "inadecuada e insuficiente".

En una rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno ha comentado que siguen las gestiones con el Estado y las corporaciones locales para buscar pequeños hoteles o albergues donde alojar y aislar a los migrantes positivos por Covid-19.

Ha comentado que esta misma tarde se ha habilitado un espacio para alojar a 59 migrantes llegados a Fuerteventura --se les ha realizado la prueba PCR-- y que en el polígono de Arinaga (Gran Canaria) se ha habilitado otro para complementar al que se ha instalado en el Puerto de La Luz.

En esa línea, ha indicado que en Tenerife se prepara un enclave militar actualmente en desuso y en Moya (Gran Canaria) otra instalación para menores no acompañados, si bien ha dejado claro que "esto no resuelve el problema de fondo".

"No son las respuestas que nos gustaría dar", ha comentado, remarcando que pese a que las competencias son de la Delegación del Gobierno --la comunidad autónoma debe dar atención sanitaria y acogimiento de menores--, el Ejecutivo regional "se siente responsable en términos morales".

Con todo, ha apuntado que a los migrantes no se les puede devolver a sus países de origen porque las repatriaciones están suspendidas por el coronavirus ni tampoco facilitar su tránsito a la Península o a otros países de Europa, indicado asimismo que este "problema" se resuelve "en origen" con la mejora de su calidad de vida.