Negociaciones para romper la anomalía y que las aguas vuelvan a su cauce. Ese es el espíritu con el que NC y el Gobierno central retomaron ayer las conversaciones para que los nacionalistas se sumen de nuevo al bloque de apoyo al Ejecutivo de Pedro Sánchez en su estrategia de gestión de la desescalada del confinamiento por la emergencia sanitaria, y en concreto a una nueva prórroga, la sexta, del estado de alarma, que se votará mañana en el Congreso. La cúpula de NC mantuvo ayer conversaciones con representantes del Gobierno central y del PSOE, que podrían continuar hoy, para negociar las condiciones en las que su diputado nacional, Pedro Quevedo, pasaría de la abstención anterior a apoyar esta la ampliación por quince días de la alarma, ello pese a que el Ejecutivo tiene garantizada de antemano su aprobación al contar ya con el apoyo del PNV y la abstención de ERC.

Fuentes de NC aseguraron ayer que la conversaciones de su presidente, Román Rodríguez, y del propio Quevedo con el Gobierno central y el grupo socialista estaban "bien encaminadas" en el objetivo de conseguir un compromiso firme por parte de Sánchez para que las administraciones canarias, tanto la comunidad autónoma como cabildos y ayuntamientos, puedan hacer uso de sus respectivos superávit, así como la autorización de un mayor endeudamiento, para paliar los efectos de la crisis en las Islas. También alguna aclaración sobre la ampliación de los ERTE turísticos en Canarias y sobre los planes específicos de reconstrucción económica del Archipiélago. Todo ello enmarcado en una negociación bilateral entre ambas administraciones. Ambas partes barajan distintas fórmulas para concretar ese acuerdo, no descartando algún tipo de documento, aunque muy probablemente se limitará a un compromiso verbal lo más explícito posible del jefe del Ejecutivo central desde la tribuna. Eso sí, en respuesta directa y singularizada a Quevedo.

NC ha convocado para esta tarde una Ejecutiva Nacional en la que decidirá el voto. Si no hay documento escrito previo al menos sí se condicionará el apoyo a esa respuesta de Sánchez a su diputado en el Congreso. Las fuentes consultadas señalan que el nivel de concreción que el piden al Gobierno central sobre el uso del superávit y el endeudamiento parte del hecho de reconocer que no sólo depende del Estado, sino de las decisiones previas por parte de la UE. No piden por tanto cifras o mecanismos concretos, que se negociarían ya en el ámbito de las relaciones bilaterales entre los Ejecutivos central y regional a partir del margen de actuación que otorgue Bruselas en estas materias, sino una prueba inequívoca de que "se avanza algo" respecto a la respuesta que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, les dio el pasado 13 de mayo al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, y al propio Román Rodríguez. Quizá en el sentido avanzado por Montero en el Senado la pasada semana de dar salida a un mix -que sume superávit y deuda- que garantice liquidez frente al desplome de ingresos.

Mayor legitimidad

Con una demostración palpable y efectiva de un cambio de actitud por parte del Gobierno central respecto a las demandas exigidas desde Canarias sería posible el retorno del voto de NC al apoyo a la prórroga del estado de alarma, sobre cuya necesidad este formación no tiene ninguna duda, y a la que nunca se opondría, pero que en las últimas semanas estaba condicionado a un avance en los niveles de "concreción y explicitación" de esos compromisos.

Lo que desde NC se entendió hasta entonces como "ausencia de respuesta a las reclamaciones de toda Canarias" fue lo que hizo que Quevedo se abstuviera en la quinta prórroga del estado de alarma, el pasado día 20.

El hecho de que, en esa misma sesión, el Gobierno pactara por escrito con los diputados vascos de Bildu compromisos para el uso del superávit por parte de entidades forales de País Vasco y Navarra, y endeudamiento para estos dos territorios, provocó indignación en NC y en el conjunto del Gobierno regional, lo que llevó a Torres a escribir una carta a Pedro Sánchez demandándole una Comisión Bilateral Canarias-Estado sobre todas estas materias.

Ese acuerdo con Bildu y el hecho de que el pasado sábado se firmara en Canarias el Pacto para la Reactivación Social y Económica es lo que lleva a NC a pensar que su exigencia hacia Sánchez "ganan en legitimidad" respecto a hace quince días.

El portavoz de la formación en el Parlamento regional, Luis Campos, asegura en este sentido que la cumbre entre ambas administraciones tiene que celebrarse "de manera inmediata" porque "no estamos en situación de seguir postergando una reunión de ese tipo", y considera que los planteamientos que hace NC para volver a apoyar al Gobierno central "son ahora una demanda del conjunto de Canarias expresada en el Pacto para la Reconstrucción que hemos firmado la mayoría de las fuerzas políticas canarias, los cabildos y ayuntamientos, así como los empresarios y los sindicatos".

Campos asegura que la decisión final sobre el voto de Quevedo se adoptará, como ocurrió el día 20, en función de la respuesta de Sánchez desde la tribuna, siempre que no haya acuerdo escrito previo, y reconoce que si ésta no fuera satisfactoria, "nos dejaría en la situación incómoda de una nueva abstención".

El portavoz de NC subraya que en su formación "estamos entendiendo desde el primer momento lo que necesita el Gobierno central para gestionar la emergencia sanitaria y la desescalada, y le hemos apoyado en todo desde el principio, pero han pasado más de dos meses y si no tenemos respuesta [respecto al uso del superávit y el vía libre para que el Ejecutivo regional puede endeudarse en unos 1.700 millones], tendríamos que valorar de nuevo la abstención".

CC se lo piensa

Por otro lado, Coalición Canaria también analizará en su Ejecutiva Nacional de esta tarde el voto de su diputada en el Congreso, Ana Oramas, a la nueva solicitud de prórroga del estado de alarma. Aunque en principio la dirección de esta formación nacionalista mantiene el margen de confianza que le otorgó al Gobierno en la última votación, tras sendos compromisos sobre los ERTE turísticos canarios por parte de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y para la creación de una comisión para estudiar el endeudamiento, que hizo el propio Sánchez, hay elementos que ponen de nuevo sobre la mesa el debate sobre si mantener el apoyo. En particular el mencionado acuerdo con Bildu sobre el País Vasco y Navarra, y también el hecho de que Montero no garantizar la semana pasada en el Senado que Canarias vaya a poder disponer de todo su superávit, casi 300 millones, son únicamente un porcentaje que iría combinado con la cifra de endeudamiento a la que autorizaría a la comunidad autónoma.

Con todo, el hecho de que sea ya la última prórroga que se solicita, y que lleva implícita una mayor gobernanza por parte de las comunidades autónomas, inclina a CC a mantener el 'sí'.