El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres (PSOE), ofreció anoche el discurso de un 30 de mayo marcado por la pandemia del Covid-19 y sus graves consecuencias sanitarias, sociales y económicas. Un Día de Canarias que "no se parece a ningún otro" y que llega cuando el Archipiélago no está precisamente para celebraciones. El presidente regional fue claro y quiso mandar a los canarios un mensaje sincero y duro, pero con la esperanza de un futuro mejor. "La peor crisis de nuestras vidas está tocando a la puerta", advirtió antes de reconocer que será aún más dura en Canarias que en otros lugares, ya que "somos una potencia mundial en una actividad, el turismo, golpeada como ninguna otra por la pandemia". Pese a la preocupación por lo que viene, Torres subrayó su optimismo: "Nuestra recuperación será más lenta, pero llegará".

El discurso de anoche se hizo desde un Teatro Guimerá vacío, que Torres utilizó para dirigirse a "una Canarias llena: de valentía, esfuerzo, compromiso y esperanza", que vive "días tan duros como exigentes". El presidente recordó que estos meses "han sacudido nuestro día a día, imponiéndonos una realidad personal, social, económica o laboral tan inédita como difícil. En apenas 80 días el mundo es otro".

Torres lanzó un mensaje de "afecto, empatía y calor" de los más de dos millones de canarios a las familias más golpeadas por la pandemia: "A quienes han perdido algún ser querido, o temen por la vida de familiares o amigos, deben saber que no están solos". Dio las gracias por su "esfuerzo titánico" a los miles de profesionales que han demostrado "un compromiso ilimitado" que en las Islas ha permitido "amortiguar los primeros golpes de la pandemia". Pese al final del homenaje diario, abogó porque "nunca dejemos de aplaudirles".

"Cuando dejemos atrás los peores momentos de la pandemia sigamos valorando, como estamos haciendo, el coraje, la capacidad y la entrega de quienes nos atienden en la primera línea", insistió. Tras el agradecimiento a "los sanitarios y a quienes, en otros ámbitos, han dado un paso al frente en el cumplimiento de sus funciones y responsabilidades"; lo hizo extensivo a los dos millones de canarios que "han atendido con generosidad, disciplina y ejemplaridad las restricciones del estado de alarma".

Mostró su alegría por comprobar que "somos un pueblo fuerte, maduro y responsable", que ahora se enfrenta a una grave crisis que no quiere ocultar: "Cruzamos estos meses la peor tormenta que jamás hayamos atravesado. Estamos plantando cara a dificultades inimaginables a ojos de las actuales generaciones. Ésta es la mayor crisis que hemos sufrido en décadas como pueblo, como sociedad, como grupo humano". Sin embargo, quiso insistir en un mensaje de esperanza en el futuro, precisamente mirando al pasado: "No es la primera vez que Canarias se ve obligada a nadar contra corriente. No es la primera vez que los canarios convivimos con un mar de dificultades, que nos vemos rodeados por un océano de problemas. Nuestra historia es la crónica de un pueblo que aprendió a sobreponerse, a luchar, a plantar cara, a no bajar los brazos, a no rendirse jamás".

"Somos hijos, nietos y bisnietos de canarios que aprendieron a convivir con las dificultades, con el aislamiento. Nuestros abuelos o bisabuelos no se rindieron, tampoco nosotros vamos a rendirnos. No nos dejaremos vencer por una pandemia. No solo vamos a pelear. Vamos a sobreponernos y a seguir avanzando. Continuaremos caminando hacia las metas que como pueblo nos hemos marcado. Sabremos convivir inteligentemente con el virus", remarcó Torres.

"Por cada puerta que la pandemia cierre, los canarios abriremos otra. A cada problema que nos ponga en el camino, le encontraremos su solución. A cada pregunta, una respuesta. El virus quedará atrás. Canarias seguirá adelante", vaticinó antes de añadir que "lo haremos juntos. Sumando fuerzas. Haciendo que se nos escuche como una sola voz. Arrimando el hombro. Construyendo para reconstruir. Participando de esa reconstrucción en la que todos tenemos algo que aportar. Todos tenemos un papel que jugar y una responsabilidad que asumir".

"Seamos conscientes de que la peor crisis de nuestras vidas está tocando a nuestra puerta. No será fácil. Que no nos asuste llamar a las cosas por su nombre. Al contrario, dimensionemos con realismo las dificultades que vamos a soportar. Remontaremos. Nos recuperaremos. Pero tan cierto como que lo conseguiremos es que nos esperan meses difíciles", advirtió.

Ante las dificultades, expresó el compromiso de actuar para paliar los daños que se avecinan: "No estamos de brazos cruzados. El virus no va a arrodillarnos. Tampoco va a doblegarnos. Vamos a defendernos. Vamos a pelear por el empleo y la economía, con la convicción, la entrega y el coraje con los que hemos defendido la salud de nuestra gente".

Recordó que la pandemia ha sacudido al mundo "sin detenerse en fronteras o territorios" y tuvo palabras para Europa, de la que espera que "entienda que nuestra región, a 1.200 kilómetros del continente, merece un especial esfuerzo del que será partícipe el conjunto del país. No estamos solos. No van a dejarnos solos". Y remarcó el mensaje de que la lucha continuará: "Pelearemos como lo hemos hecho contra el virus para reconstruir los puestos de trabajo destruidos, para reconstruir el bienestar que la pandemia está atacando. Iniciamos un camino lleno de curvas pero en los próximos meses dejaremos atrás los peores momentos y saldremos adelante. Con perseverancia, responsabilidad y unidad, Canarias saldrá adelante. Y lo haremos bien".

Torres aprovechó para anunciar que todos los canarios recibirán un galardón histórico: "Los canarios pueden sentirse orgullosos porque entre todos hemos gestionado una situación que ha desbordado a los gobiernos más fuertes del planeta. Es por ello que este año queremos otorgar en este acto un único Premio Canarias, ese que pretende reconocer a todos los canarios su esfuerzo, ese que queremos otorgar a la ciudadanía al completo".

La jornada de ayer también fue, a juicio de Torres, "un día especialmente importante para esta tierra, ya que los representantes de la sociedad civil, de la economía, de las instituciones y los partidos políticos hemos querido mandar un mensaje de unidad. Sin duda, nuestra mejor fortaleza ante la crisis. Los canarios tenemos desde hoy un pacto que nos marcará la forma en la que queremos reconstruir el futuro que el Covid-19 parece querer negarnos: el Pacto para la Reactivación Social y Económica", cuyo principal objetivo es proteger a los más vulnerables.

"2020 será recordado como el año que sacudió nuestros días, volviéndolos del revés. Estamos en deuda con el esfuerzo de quienes nos precedieron. Por ello nos toca ahora a nosotros hacer un esfuerzo ejemplar para que esta emergencia sanitaria no se lleve por delante el futuro de nuestros jóvenes. Hoy, Día de Canarias, no resulta fácil hablar de celebraciones. Pero sí de la esperanza. Del optimismo. De la confianza que merece un pueblo capaz, valiente, fuerte", añadió Torres antes de concluir: "Es verdad que todo ocurrió de repente. Éramos invencibles. Pero les aseguro que esta pandemia no va a arrebatarnos el futuro. No vamos a permitírselo. Los canarios sabemos luchar, y vencer. Cuando llegue ese futuro, que entre todos vamos a recuperar, miraremos hacia 2020 y nos sentiremos enormemente ?orgullosos de lo que hicimos".