El consejero de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, dijo ayer que "en ningún caso" habrá problemas de desabastecimiento en las islas pese a las advertencias de la Asociación de Navieros Españoles (Anave).

En una entrevista admitió que el subsector del transporte afronta una "situación compleja", como otros, debido al parón económico por la pandemia, pero resalta que hace varias semanas se alcanzaron acuerdos con las compañías para garantizar el suministro.

"Quedar aislados no está en ningún cálculo", subrayó, al tiempo que resaltaba que desde el Ministerio de Transportes les han transmitido que están en "contacto directo y permanente" con las navieras y "no hay preocupación".

Con la entrada en vigor de la Fase 1 en toda Canarias a partir del lunes, el consejero da por hecho que aumentará la movilidad si bien precisa que para viajar entre islas seguirá habiendo restricciones y solo se permitirá por causas justificadas o motivos laborales.

Entre islas, solo control térmico

Además, señaló que la comunidad autónoma no tiene capacidad para hacer test a todos los pasajeros, exigencia que solo se va a plantear cuando se reabra el tráfico aéreo y marítimo con la Península, por lo que entre islas se mantendrá solo el control de temperatura. Franquis también destacó que los indicadores sanitarios de Canarias "son muy buenos" y asimismo subrayó que en ningún momento ha habido saturación en los hospitales.

Sobre la recuperación económica comentó que es "fundamental" que a Canarias se le permita utilizar todo su superávit y la capacidad de endeudarse a largo plazo.