El grupo nacionalista en el Parlamento de Canarias ha pedido este miércoles al Gobierno regional mayor "claridad y transparencia" sobre el grado de cumplimiento de los marcadores sanitarios que plantea el plan de desconfinamiento, ya que no aclara qué parámetros o porcentaje de cumplimiento deben producirse para pasar de fase, entre otras cuestiones.

El portavoz del grupo nacionalista, Pablo Rodríguez, preguntará así en la próxima sesión de control al Gobierno canario sobre "improvisaciones" que a su juicio detectan en la aplicación del plan y sobre las "dudas de la ciudadanía" al respecto.

Unas dudas que, según Pablo Rodríguez, deben solventarse cuanto antes para transmitir "seguridad y tranquilidad" sanitaria y económica en el regreso de las actividades que se puedan retomar durante la próxima semana.

"Es necesario que se informe a la ciudadanía sobre cómo evoluciona el cumplimiento de esos parámetros, ya que solo así se podrá construir y recuperar la sensación de seguridad que se necesita para la vuelta a la normalidad social y económica", ha insistido Rodríguez en un comunicado.

CC-PNC-AHI ha pedido también que el plan de desconfinamiento emplee como referencia a las provincias y no al conjunto de la comunidad autónoma, y que se aclare si es posible desplazarse de isla por motivos de trabajo, entre otros asuntos.

Para Pablo Rodríguez, el plan no ha tenido en cuenta las singularidades del hecho insular, por lo que cree que se retrocede en algunos aspectos: "somos distintos y, por lo tanto, el desconfinamiento en Canarias debe ser distinto también. No se puede entender la unidad provincial de la misma forma que la realidad insular", ha añadido.

Además, el diputado nacionalista preguntará al presidente del Ejecutivo canario, Ángel Víctor Torres (PSOE), sobre el panorama del sector turístico en las islas, cuya reapertura bajo los condicionantes actuales puede producir "un efecto perverso".

Rodríguez preguntará entonces si el inicio de la actividad hotelera conllevará la extinción de los ERTE, que supondría una "debacle económica sin precedentes" porque, en primera instancia, obligaría a las empresas del sector a reincorporar a todo su personal sin presencia alguna de turistas.

Y esto provocaría, ha continuado el portavoz, que los ERTE pasen "de forma inmediata" a convertirse en despidos y en la desaparición de miles de puestos de trabajo que, subraya, serán "muy difíciles de recuperar".

Pablo Rodríguez incide asimismo en cómo se establecerán los protocolos de seguridad sanitaria en las distintas actividades económicas, teniendo en cuenta que el "público potencial" son extranjeros que demandarán, en su opinión, medidas "homogeneizadas" con las que se toman en su país.

De hecho, el presidente de la patronal hotelera, Jorge Marichal, subrayó ayer en esa línea la importancia de que el protocolo de reapertura del sector hotelero sea "único e igual" en todo el país y susceptible de "convalidación" por el resto de países europeos, dado que son los principales emisores de turistas.

Rodríguez ha pedido finalmente que el comienzo de la desescalada no suponga "una excusa" para evitar la realización de tes masivos y para que se garantice a personal sanitario, empresas y trabajadores el acceso a material de protección, así como a la ciudadanía.