La patronal de los concesionarios de la industria de la automoción, Aconauto Canarias, ha pedido este viernes al Gobierno de Canarias confianza en sector y la agilización de la reapertura al público tras el fin del confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus Covid-19.

En un comunicado, Aconauto Canarias defiende adelantar el fin del confinamiento en las islas ante la baja tasa de contagios y pide al Ejecutivo regional que tenga en cuenta a su sector -"estratégico"- para reanudar cuanto antes la actividad en los puntos de venta.

Afirma que Canarias es una de las comunidades que controla de "una forma más eficiente la expansión y los efectos del coronavirus Covid-19" y que, por este motivo, la desescalada debe adelantarse en el archipiélago.

La patronal, además, asegura que ya ha hecho los deberes aprobando junto a las organizaciones sindicales un protocolo sanitario para el reinicio de la actividad productiva de sus negocios.

La organización que preside Manuel Sánchez recuerda que ha manifestado "la confianza en la gestión del Gobierno en la crisis sanitaria", por lo que entiende que también el Ejecutivo "debe confiar en la automoción y en el tejido empresarial canario, cuya prioridad es eliminar riesgos y asegurar las más exigentes medidas de seguridad en sus establecimientos".

En su opinión, reabrir los concesiones de venta de vehículos "no supondría un peligro para la salud pública" y, a la vez, contribuiría a "aliviar las graves perspectivas para la economía" de las islas.

Añade que las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Canarias solo sumaron 51 unidades en los primeros 22 días de abril, frente a las 3.802 unidades en el mismo periodo de 2019.

A su juicio, esta cifra es una debacle dentro de un sector que no cuenta con precedente alguno en la historia automoción de Canarias.

Subraya además que el motor es un sector clave en la región, dado que los concesionarios de automoción facturaron el año pasado 708 millones de euros, un 19,8 por ciento más que en 2018.

Recuerda que el negocio que generan estos establecimientos representa el 3,3 por ciento del producto interior bruto (PIB) de la Comunidad Autónoma y que de esta industria dependen cerca de 7.000 empleos directos en el archipiélago, además de otros 20.000 indirectos.

La nota añade que en la actualidad 199.401 canarios están afectados por los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs), una medida que, aunque dolorosa, ha sido necesaria y ha salvaguardado un "futuro incierto" para las empresas de la región.

Para Aconauto Canarias, el negocio de la automoción aún tardará meses en alcanzar niveles que aseguren la subsistencia y los datos de empleo previos a la pandemia, por lo que reclama a la Administración pública que mantenga los ERTEs por causa mayor y que la recuperación del empleo se realice de forma gradual.