Intersindical Canaria ha solicitado que se aísle al personal del Servicio Canario de la Salud (SCS) que haya podido hacer uso de las mascarillas FFP2 de la marca Garry Galaxy que resultaron defectuosas, según un comunicado difundido este lunes por el sindicato.

Intersindical reclama también que se aísle a aquellos trabajadores expuestos a posibles contagios por la COVID-19 como consecuencia del uso de este material por parte de terceras personas.

El portavoz de comunicación de la federación de Salud del sindicato, Ruymán Pérez, ha criticado el de que la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias se haya "limitado a localizar al personal afectado por el uso de estas mascarillas para hacerles las pruebas correspondientes lo que, sin duda, es del todo insuficiente".

Pérez advierte de que, si no se les aísla "en el momento en que se les identifica, tanto el resto de trabajadores como las personas de su entorno continuarán en riesgo".

Desde el sindicato se recuerda que entre los centros sanitarios de las islas se distribuyeron alrededor de 3.000 mascarillas defectuosas, "que han puesto en riesgo al personal del SCS que ha confiado en su eficacia para combatir el virus, por lo que es de extrema urgencia que a todos los trabajadores se les realicen los test necesarios", ha explicado Pérez.

"Es inadmisible la actitud de la administración, que pretende que el trabajador afectado continúe relacionándose con su entorno, mientras espera a que le haga el test y le den el resultado correspondiente, poniendo en peligro tanto al resto del personal del SCS como a su entorno más cercano y, con ello, al conjunto de la población", ha señalado el dirigente sindical.

IC añade que hay centros sanitarios, como es el caso el Hospital Puerta del Mar, en Cádiz, donde se han confirmado sanitarios contagiados por el uso de estas mascarillas, "por lo que es prioritario que la Consejería de Sanidad ponga en marcha todas las medidas necesarias para minimizar los daños derivados del uso de este lote defectuoso de mascarillas"