Ni diferencias ni fisuras. El presidente del Ejecutivo regional, Ángel Víctor Torres, sustentado por PSOE, Nueva Canarias (NC), Podemos y la Agrupación Socialista Gomera (ASG) con el denominado pacto de las flores.

La gestión de la crisis llevada a cabo por el Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez no contenta a todos los socios del Gobierno canario. Ni Román Rodríguez ni Casimiro Curbelo, líderes de NC y ASG, respectivamente, entienden la dilación del Ministerio de Hacienda para posibilitar el endeudamiento a largo plazo y el uso de los fondos bloqueados en el superávit.

Incluso el también vicepresidente regional y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos mostró su desencanto con el acuerdo de medio billón alcanzado por el Eurogrupo, al considerarlo "insuficiente", frente a la valoración positiva expresada por Torres. A esto se suma que el portavoz del Ejecutivo regional, Julio Pérez, admitió en una entrevista publicada ayer en EL DÍA que existen tensiones sobre algunos aspectos económicos derivados de la gestión del Estado. Y en la esfera sanitaria también se han producido desencuentros. La labor llevada a cabo por la exconsejera de Sanidad, la socialista Teresa Cruz Oval, despertó malestar en algunos miembros del Ejecutivo hasta que, finalmente, Ángel Víctor Torres decidió destituir a Cruz y colocar en su lugar a Julio Pérez, también consejero de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno canario.

El presidente del Ejecutivo regional niega, no obstante, que la sangre llegue al río. Torres, en la rueda de prensa posterior a la videoconferencia que Pedro Sánchez mantuvo con los presidentes autonómicos, afirmó que el Gobierno vive la crisis desatada por la pandemia del coronavirus con preocupación, como cualquier familia, por sus enormes y dañinas repercusiones.

La tensión que genera la incertidumbre económica, la grave afección al mercado laboral o la respuesta que se pueda dar desde el sector público para volver, cuanto antes, a la normalidad perdida son algunos puntos que, según Torres, suscitan preocupación a todos. Para el presidente canario, ocultar que tales tensiones existen "es negar la realidad", pero advierte que eso no significa que haya diferencias entre los socios. "Todo lo contrario", apostilló.

Es más, el jefe del Ejecutivo regional incidió en que, ante una situación adversa como la actual, los miembros del Consejo de Gobierno están más unidos, por lo que aprovechó la ocasión para apelar a la unidad de acción y lograr el apoyo de la sociedad y de todos los partidos en la lucha contra el Covid-19.

En lo referente al acuerdo alcanzado por el Eurogrupo tras múltiples idas y venidas, por el que se van a movilizar 540.000 millones de euros, Ángel Víctor Torres recalcó que consideró que, en principio, se trataba de un buen acuerdo, si bien hasta el 23 de abril éste no estará cerrado y hay tiempo para mejorarlo: "Lo conseguido, bienvenido está y no renunciamos que se pueda lograr un acuerdo final, pero, evidentemente, eso depende la Unión Europea (UE) y de los actores que allí negocian".