El Gobierno de Canarias no está dispuesto a dar trato de favor alguno a Ryanair para que la aerolínea reabra sus bases en las Islas. La low cost que timonea el excéntrico Michael O'Leary tendrá que jugar con las mismas reglas que la competencia. Así lo dejó claro la consejera de Turismo del Ejecutivo regional, Yaiza Castilla, durante su comparecencia en comisión parlamentaria. El diputado de CC José Alberto Díaz-Estébanez fue quien preguntó a la consejera sobre la postura del Gobierno en relación con la aerolínea de bajo coste, que el 8 de enero desmanteló definitivamente sus bases en Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote. Díaz-Estébanez advirtió de que no sería la primera vez que Ryanair cierra determinadas bases para facilitar despidos y tiempo después reabrirlas con menor coste salarial. El parlamentario nacionalista pidió a Castilla que la low cost no resulte "premiada" con nuevas rutas en el Fondo de Desarrollo de Vuelos tras el "castigo" a sus empleados, a lo que la consejera respondió negando la mayor. Castilla aseguró que Ryanair no ha hecho demandas específicas y que el Gobierno estará "vigilante" para que se respete la normativa laboral. "No todo vale", subrayó.